El Teatro Liceo acogió el pasado viernes el acto de entrega de los títulos de Hijos Adoptivos de Baena a las Madres Dominicas del Convento de Madre de Dios y a Rafael Onieva Ariza tras las resoluciones aprobadas en Pleno el pasado 23 de septiembre. Fue un acto lleno de emotividad, con familiares y amigos arropando a los homenajeados.

El alcalde de Baena, Luis Moreno, hizo entrega de los títulos al propio Rafael Onieva y a sor Pilar Cano como priora del convento. Del empresario baenense afincado en Madrid, el alcalde destacó “su fiel compromiso con Baena, con inversiones o aventuras empresariales algunas de ellas guiadas por su finalidad social y no siempre cosechando los legítimos resultados económicos que tenía al alcance en otras ciudades”. Por su parte, a las madres dominicas se refirió afirmando que “si alguna generación permitiera que se fueran algún día de Baena, no estaría a la altura de la dignidad de la historia de la ciudad”.

En las intervenciones de agradecimiento, la emoción se apoderó de Rafael Onieva, quien se dirigió a los asistentes con la ayuda de su hija Paloma. El propietario del hotel y la residencia de ancianos La Casa Grande agradeció el cariño de los suyos y tuvo palabras de “aliento” para los baenenses que más sufren la crisis. También sor Pilar se refirió a los problemas económicos actuales, al tiempo que respondió al recibimiento del título honorífico anunciando que “todos vosotros sois hijos predilectos de nuestro convento”.

La música del cuarteto de cuerda Curtuva puso el broche al acto.