Este mes de enero ha entrado en vigor la nueva guía sobre el uso de las cookies, un documento elaborado por la Agencia Española de Protección de Datos (Aepd) que obliga a las webs a mostrar, de forma visible y clara, la opción de aceptar las cookies o, por el contrario, cobrar una tarifa para poder rechazarlas.
Sin embargo, para aquellos usuarios que quieran seguir rechazando las cookies, evitando así que las webs rastreen su actividad, sigue habiendo algunas formas:
Acceder a los ajustes de privacidad de tu navegador y modificar la información que rastrean las cookies. Puedes elegir
bloquear todas las cookies, solo las de terceros o las de determinadas páginas. También puedes borrar las cookies que ya se han almacenado en tu dispositivo.
Usar el
modo incógnito del navegador. Esta opción te permite navegar por internet sin dejar rastro de tu actividad, ya que no guarda el historial, las cookies ni los datos que introduces. Sin embargo, ten en cuenta que el modo incógnito no te protege de los rastreadores que usan otras técnicas, como el fingerprinting o la supercookie.
Usar una VPN o una
red privada virtual. Una VPN te permite conectarte a internet a través de un servidor seguro y encriptado, que oculta tu dirección IP y tu ubicación. Así puedes evitar que las cookies te identifiquen y te rastreen, y también puedes acceder a páginas web que estén bloqueadas en tu país.