La titular del juzgado de Violencia sobre la Mujer número 4 de Barcelona ha ordenado el ingreso en prisión sin fianza de la pareja de una mujer que falleció el pasado lunes al caer desde un cuarto piso en el distrito de Horta en Barcelona, ante los indicios de que fue él quién la tiro.
En el marco de la causa abierta en este juzgado, la jueza imputa al hombre, B.I., los posibles delitos de homicidio, dos delitos de lesiones en el ámbito de violencia sobre la mujer y un delito de violencia habitual.
Según indica la jueza en el auto de prisión, el imputado inició hace un año y medio una relación con la fallecida, y ya el día 17 de agosto de 2023, tras una discusión, los Mossos se personaron en el domicilio y vieron que ella presentaba múltiples arañazos y hematomas, aunque ella afirmó que se lo había hecho en la playa.
Posteriormente, después de esa presunta agresión, que no fue denunciada por la mujer, estuvieron seis meses sin verse, hasta que, en abril de 2024, volvieron a estar juntos, se prometieron y ella se fue a vivir al domicilio del hombre.
Sin embargo, las agresiones se mantuvieron, según ha declarado una amiga de la víctima, y según otro testigo, el día 29 de mayo de 2024 vio como ella estaba en la terraza y él la agarro y metió dentro de la vivienda, para después alzar la mano presuntamente contra la fallecida.
Según la jueza, estas agresiones son compatibles con los hematomas que se han identificado en el cuerpo de la víctima, que son anteriores al día de su muerte, aunque la mujer tampoco interpuso denuncia ni acudió a ningún centro médico.
Finalmente, en la noche del pasado 3 de junio, se produjo otra discusión entre la pareja en la terraza del domicilio que fue oída por diversos testigos y en el transcurso de la pelea oyeron un fuerte golpe, producido por la caída de la mujer desde un cuarto piso, que falleció al instante por traumatismo craneal.
Después de la caída, el investigado salió corriendo de la vivienda, sin camiseta y en zapatillas y acudió a casa de su primo, a unos 800 metros de su vivienda, donde fue localizado por la policía, a quien aseguró que llevaba dos horas en esa casa.
Esta versión fue desmentida por los propios familiares del investigado, quienes dijeron que el hombre acababa de llegar y que les dijo que su pareja "se había tirado por la ventana".
Además, otros testigos vieron que, al bajar a la calle, el hombre levantó la cabeza de la mujer y no pidió auxilio por si todavía estuviera viva, ni llamó a urgencias, sino que siguió corriendo, aún cuando fue perseguido por dos personas que le insultaban.
La madre, que estaba en el domicilio, es la única testigo que afirma que vio a la mujer subirse a la barandilla y que salió corriendo para pararla, junto al investigado, pero que no pudieron llegar a sujetarla.
La jueza considera que en este momento procesal "los testigos aportan datos indiciarios que acreditan que no hubo una caída voluntaria" por parte de la víctima, sino que, en el curso de una discusión, el investigado la tiró por la terraza.
Justifica el auto de prisión sin fianza en que, en caso de quedar en libertad, el investigado "puede intentar manipular a los testigos".