El Expediente de Regulación de Empleo en la antigua CajaSur, reconvertida en el banco de la vasca BBK, ha finalizado con la salida de 665 trabajadores de la entidad, de los cuales 148 se han acogido a las bajas incentivadas y suspensiones temporales de contrato para evitar ser despedidos.
Este es el balance final del ajuste laboral en la antigua caja cordobesa que se ha dado a conocer en la comisión de seguimiento reunida hoy en Córdoba.
Según han informado a Efe fuentes sindicales presentes en la reunión, al final la totalidad de los trabajadores a los que la empresa advirtió de que serían despedidos si no se acogían a las bajas incentivadas o suspensiones temporales han decidido adherirse a estas medidas y beneficiarse así de la prima adicional de 6.000 euros por salir de la entidad.
El pasado lunes, cuando expiró el plazo voluntario para sumarse a esta fórmula, solo 89 trabajadores -de los 240 necesarios- se habían acogido a estas medidas.
Esta situación llevó a sindicatos y empresa a acordar una ampliación de tres días de este plazo, en los que la empresa comunicó a 151 empleados que podrían verse afectados por medidas no deseadas.
Finalmente, los afectados han decidido sumarse al plan, aunque en vez de 151 han sido 148 ya que uno de los afectados ha fallecido, otro es delegado sindical y el tercero es miembro de la Asamblea General de la entidad.
De este modo, el ajuste laboral en la antigua caja cordobesa se ha concretado con 428 prejubilaciones y 237 bajas incentivadas y suspensiones temporales de contrato, de las cuales 148 se han producido después de que la empresa advirtiera a los afectados de que serían despedidos si no se adherían al plan.
El responsable de Comunicación de Aspromote -sindicato mayoritario en BBK Bank CajaSur-, Antonio Cuesta, ha asegurado a Efe que la valoración del proceso no puede ser del todo positiva porque se han tenido que adoptar medidas no voluntarias, aunque ha destacado que las bajas incentivadas conseguidas para los trabajadores son "las mejores del sector".
"Ha habido 151 dramas personales y no podemos sentirnos satisfechos", ha dicho Cuesta.
Por su parte, el delegado de CCOO en BBK Bank CajaSur, José Rafael Navarro, ha sostenido que hubiera sido mejor que no se hubieran producido salidas forzosas y ha añadido que el ajuste laboral consolida el futuro de la entidad, que se queda con una plantilla de más de 2.100 trabajadores.