El Teatro Romano se construyó a finales del siglo I antes de Cristo

El equipo interdisciplinar liderado por la Universidad de Cádiz (UCA) que se encuentra interviniendo en los restos del Teatro Romano de la ciudad ha finalizado la primera fase de los trabajos de emergencia, lo que ha supuesto la realización del 70 por ciento de todas las intervenciones arqueológicas y la recuperación del 30 por ciento del antiguo escenario, según queda reflejado en la publicación Resultados de las investigaciones arqueológicas (2010-2011).

Estas excavaciones arqueológicas, que se vienen desarrollando desde hace casi un año por parte de la Junta de Andalucía en colaboración con el área de Arqueología de la UCA, también han permitido situar la fecha de construcción del Teatro Romano de Cádiz a finales del siglo I antes de Cristo.

Según explicaron el delegado del Gobierno de la Junta en Cádiz, Manuel Jiménez Barrios, la delegada provincial de Cultura, Yolanda Peinado, y responsables de las excavaciones de la UCA, durante la presentación de los resultados, “hasta que estos tres sondeos arqueológicos han venido a constatarlo, sólo se tenía constancia de la fecha de construcción del teatro a través de referencias literarias e históricas”.

El coordinador de los sondeos arqueológicos, Darío Bernal, subrayó que “se ha excavado hasta la fase de construcción del monumento, confirmándose que la fecha de construcción del Teatro Romano de Gades se data a finales del siglo I antes de Cristo, como lo demuestra la decoración arquitectónica del edificio”. Además, se ha constatado que el teatro estuvo unos 200 años “a pleno rendimiento” y se han encontrado siete de las gradas exclusivas para de la clase senatorial.

Gracias a los sondeos se han documentado íntegramente siete gradas de la ima cavea, de las cuales sólo se conserva la cimentación en sillería del graderío.

También se ha documentado un pasillo de entrada y salida (vomitorium) y el asiendo de una barandilla de separación entre el graderío propiamente dicho y los asientos más nobles del teatro.

Precisamente, el vomitorium recuperado, que se encontraba colmatado de escombros, se utilizará de acceso al teatro desde el futuro centro de interpretación del monumento que se ubicará en el barrio de El Pópulo, bajo el que se localiza prácticamente toda la zona del escenario y la parte posterior del teatro.

La cimentación se conserva prácticamente completa tanto al este como al oeste del área de excavación, permitiendo la total restauración de las zonas vacantes en el futuro.

Durante el desarrollo de la intervención en el antiguo Gran Teatro de Balbo el Menor se han exhumado unos 500 sacos de materiales muebles con miles de artefactos cerámicos y biofactos, entre los que se destacan abundantes cerámicas medievales almohades y del período taifa de diversa procedencia y factura.

Aunque de época romana ha aparecido un menor número de materiales, destacan la cantidad y variedad de placas marmóreas que dan prueba de la riqueza que el monumento tuvo que atesorar en su programa decorativo, así como del intenso expolio que vivió desde su abandono, entre los siglos IV y V después de Cristo correspondientes al Bajo Imperio Romano. De estos restos destacan tres columnas de ónice, material posiblemente de origen africano; un casetón; una cornisa de mármol blanco italiano y una veintena de fragmentos de inscripciones funerarias.

En los once meses en los que se ha desarrollado la primera fase de la recuperación y puesta en valor de uno de los teatros romanos “más importantes de España, la Caja de Pandora de Cádiz”, en palabras del coordinador de las excavaciones también se ha desarrollado un proyecto complejo de consolidación de las edificaciones emergentes con un presupuesto de 1,38 millones de euros para la sustentación de todos los muros medianeros que presentan fachada al recinto abierto del teatro.

Una vez terminadas las obras de emergencias, explicó Jiménez Barrio, “se realizarán las excavaciones arqueológicas que culminan el área abierta de las gradas y la orchestra (área semicircular entre las gradas y el escenario)”.

Finalizados todos los trabajados se procederá a la restauración integral del teatro y su puesta en valor.
La delegada provincial de la Cultura aseguró que cuando concluyan los trabajos de recuperación y puesta en valor, sin fecha determinada de finalización, “el monumento sí va a ser visitable”, pero puntualizó que la posibilidad de que sea utilizado de nuevo como teatro “dependerá de lo que nos encontremos, pero espero que sea posible”.
En calidad de arquitecto de las obras, Alejandro Cobo valoró “la valentía de la Administración de afrontar un proyecto realmente difícil, buena parte de él a ejecutar debajo del entramado urbano del barrio de El Pópulo, bajo viviendas habitadas”.

El teatro Romano de Cádiz se descubrió en 1980 en unas excavaciones para localizar el Castillo de la Villa. Hasta entonces sólo se habían visto algunas de sus galerías interiores. Sobre sus ruinas los musulmanes edificaron una alcazaba hasta que en el siglo XIII Alfonso X El Sabio la conquista trazando sobre ella parte de la ciudad medieval.