El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad está preparando un real decreto para establecer prioridades y unificar los criterios clínicos que las comunidades autónomas deben seguir para atender a los pacientes que tienen en lista de espera, tanto para la realización de pruebas diagnósticas como para intervenciones quirúrgicas.
Con esta norma tratarán de reducir el tiempo de espera actual para ser sometidos a una operación no urgente, que en diciembre de 2012 ha alcanzado su máximo histórico al llegar a los 100 días de media, 24 más que en junio del mismo año.
La ministra del ramo, Ana Mato, reconoció este martes en un acto en Palma de Mallorca que "todas las comunidades están haciendo esfuerzos importantes para mejorar las listas".
No obstante, y según han informado a Europa Press fuentes de su departamento, actualmente existen diferencias entre las comunidades a la hora de establecer prioridades para operar a sus pacientes, y en algunas se incluye en la misma lista de espera diferentes procesos de desigual gravedad.
Por ello, con este real decreto pretenden unificar criterios para "priorizar las enfermedades o procesos que a la larga pueden ser más problemáticos" y, por tanto, deben atenderse antes.
El Ministerio está trabajando con las comunidades para la elaboración de esta norma, que una vez redactada se debatirá en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (SNS).
Según los últimos datos recopilados por Sanidad, a finales del año pasado había 571.395 pacientes en lista de espera para operarse, un 6,4 por ciento más que en junio (536.911). De estos, un 16,5 por ciento llevaban más de 6 meses de demora desde que se les prescribió la intervención.
Además, en este último semestre se ha incrementado el tiempo de espera para la primera consulta con el médico especialista, ya que se ha pasado de 53 a 59 días de demora media.