Hoy en mis Ecos del Tajo voy a hablar más de lo cotidiano, como sin duda son las fiestas de este fin de semana.
Son fiestas donde desde tiempo inmemorial recibíamos el 1º de noviembre con los tostones de castaña, en Ronda nos acordamos los que hacía Salvador Jiménez ‘El Rano’ en la plaza de Carmen Abela, y los del Barrio de San Francisco, ya tradicionales. a las castañas se le sumaban los huesos de santo, los rosquitos de vinos, una buena mistela y el rico aguardiente de la Serranía.
Lástima que la sociedad de consumo nos haya introducido en los últimos tiempos la fiesta de origen celta de Halloween -también denominada Noche de Brujas o Noche de Difuntos, sus raíces están vinculadas con la conmemoración celta del Samhain- y que tanto está calando en los jóvenes.
Es una verdadera pena que vayan desapareciendo nuestras costumbres más ancestrales. Menos mal que en muchos pueblos de nuestro entorno los tostones de castañas y otras costumbres por estas fecha siguen vivas.
Yo sin duda me quedo con lo antiguo. A Josefita, una encantadora serrana de 80 años le comenté lo de la fiestecita de marras y el protagonismo que le daban a las calabazas. Me dijo casi enfadada: “Pues sabe lo que te digo, pa mí las calabazas como están güenas es en un guiso con papas”.