Con la reforma de la ministra Fátima Báñez, el paro ha bajado a niveles impropios de un país, todavía, desarrollado como es España
La RAE define falacia como: "Engaño, fraude o mentira con que se intenta dañar a alguien" o como "hábito de emplear falsedades en daño ajeno". Pues bien, limitándonos a esta definición y viendo la actuación y discurso del Gobierno de Mariano Rajoy en materia laboral, podemos decir que su discurso es una falacia en sí, una mentira enorme.
Para probar esto, no hay que irse muy atrás en el tiempo. En diciembre de 2013, el paro bajo en 69.300, según la EPA. Según el Ministerio de Trabajo, bajó alrededor de 150.000 personas. Pero: ¿Que oculta estas cifras?. ¿Es efectiva esa baja? ¿Es una treta electoral de los populares de cara a las europeas para evitar el presumible batacazo que se van a llevar?. Yo me inclino por lo segundo.
Bajada de paro no tiene que significar creación de empleo. Manejamos indicadores de paro registrado. Es decir, que puede bajar perfectamente el número de parados pero no implica que haya más empleo y, por ende, más riqueza. El paro, en este contexto de crisis, puede bajar por la salida de españoles a inmigrantes de nuestras fronteras para buscar trabajo y se borran del SEPE (Servicio Público de Empleo Estatal). Si sale población activa del país, baja tanto esta como el número de parados, pero es una bajada ficticia. Otra causa puede ser la dejadez de los parados de apuntarse al SEPE y buscar un empleo por su cuenta. Finalmente, la última sería la bajada del número de afiliados de la Seguridad Social. Además, hablamos de Diciembre, un mes en el que las rebajas, compras de navidades, puente de la constitución y la inmaculada aumentan el número de contrataciones temporales, las cuales están en un 35% del total que se realizan y dentro de esas, el 38% se realiza por periodos inferiores a un mes.
Además, los sueldos son un acicate importante para que la gente emigre y, por consiguiente, se borren del SEPE. Porque recordemos que, con la reforma de mi "querida" ministra Fátima Báñez, la de San Juan a la que no se le adjudica ninguna formación profesional además de la política, ha bajado a niveles impropios de un país, todavía, desarrollado como es España. Un ministro/a que se encargue del ministerio más importante en estos tiempos como el de Empleo y Competitividad y no haya trabajado y conozca a fondo el mercado laboral, no puede hacer sus funciones con el cien por cien de éxito. Puede poseer un conocimiento muy técnico pero lo que cuenta es la realidad diaria y esa, nos dice, que la reforma ha hecho, mas bien, nada.
Este ejecutivo preconiza la transparencia en todo y para todos pero ellos, después, no se aplican el consejo ni en esto. Ofrecen datos para vender esperanza. Son unos profesionales a la hora de vender humo y despreciar el derecho de los ciudadanos a estar informados. Mentirosos y cínicos. Y sin embargo, actualmente, 4,81 millones de personas siguen en paro.