Las cosas grandes que uno quiera ser, los hombres pequeños las estorban”. Se trata de una frase contundente de Manuel Azaña, y he querido sacarla a colación con motivo de los terrenos de la playa de La Puntilla que la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz quiere sacar a subasta, una decisión que a la corporación municipal no comparte argumentando que son terrenos pertenecientes al pueblo, y hasta ahí estoy de acuerdo.
Pero no sería conveniente entrar en pleito con la Autoridad Portuaria acerca de la propiedad porque probablemente lo perderíamos, así que le daré una idea al alcalde por sí tiene bien a bien ponerlo en práctica. Eso contando con que nuestro primer edil tiene asesores suficientemente preparados como para poder llevar una negociación en la que las dos partes salgan airosas.
El Puerto de Santa María tiene sobrada entidad para ser la ciudad turística y cultural más importante de la provincia, y para ello necesita contar con una infraestructura hotelera y gastronómica capaz de atraer un turismo de calidad del que estamos tan necesitados; debemos recuperar el esplendor del que siempre hemos presumido.
Ciertamente en esos terrenos se podría construir un campo de fútbol, tan demandado por la ciudadanía, pues bien solicítelo a Autoridad Portuaria e incluyan en el convenio de la subasta para edificar un hotel, una cláusula en la que se fije la construcción de un campo de fútbol en otros terrenos cedidos por el Ayuntamiento. Haberlos haylos.
Un buen hotel es una fuente de puestos de trabajo, mi querido amigo. En la competición ciclista, los mejores necesitan del llamado “liebre” para poder ganar la carrera y los ciegos lazarillos para salvar obstáculos.