El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se mostró ayer “decepcionado” con la actitud de la CEOE en el diálogo social y anunció que el Ejecutivo aprobará el 13 de agosto, por decreto ley, una nueva protección para los desempleados que hayan agotado su cobertura por desempleo.

En rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros extraordinario celebrado en Palma de Mallorca, Zapatero informó de que esa cobertura será, en principio, de seis meses, y de que el Ejecutivo estudia otras medidas “específicas” que ayuden a paliar el paro en los menores de 35 años.

Sobre el documento de acuerdo enviado el jueves por la CEOE al Gobierno y los sindicatos en materia de diálogo social, destacó que la “llamada propuesta” de la patronal es para el “fin del diálogo” y para imposibilitar el pacto.

Aunque sostuvo que al Gobierno le hubiera gustado el acuerdo, subrayó que el presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, se ha salido del “marco del acuerdo” con su propuesta.

Al respecto, Zapatero volvió a reiterar su “decepción” por ese documento de los empresarios, ya que “cuando hay que arrimar el hombro es ahora”.

El jefe del Ejecutivo además se mostró convencido de que “muchos empresarios desean” el acuerdo, porque “cuando tenemos una recesión tan grave, todos queremos colaborar”.

En este sentido, estimó que las medidas que defiende la CEOE son “inasumibles para un Gobierno responsable y para la mayoría de los ciudadanos”.

En su opinión, significan “ir hacia la España de muchos años atrás” y “no sirve para nada hacer que los trabajadores pierdan derechos”, cuando la España actual es “moderna” y ha de “equilibrar los sacrificios de la crisis económica”.

Sobre la principal demanda de la CEOE, la rebaja de cinco puntos de las cotizaciones a la Seguridad Social, precisó que su coste es de 15.000 millones, lo que supone la nómina de todas las pensiones durante “tres meses”.

“No puede nadie razonablemente defenderlo porque afecta al equilibrio de la Seguridad Social”, advirtió.
No obstante, reconoció que el Gobierno estaba dispuesto a hacer “un esfuerzo” de rebaja de cotizaciones “razonable”, pero “nunca, nunca aceptará una propuesta que pone en peligro la solidez de las pensiones”.

Del último borrador de acuerdo del Gobierno, el del 20 de julio, indicó que estaba “muy elaborado, muy trabajado y muy meditado”, ya que reducía los costes empresariales y mejoraba sus dificultades financieras, al tiempo que mejoraba la protección de los desempleados.

Todo ello “sin pedir ningún sacrificio a los empresarios”, aseguró Zapatero, quien acusó a estos de querer una “desregulación” de la legislación del mercado de trabajo, “sacando” de la tutela judicial los expedientes de regulación de empleo y los despidos.

Para el presidente José Luis Rodríguez Zapatero, en definitiva, la propuesta de la CEOE supone en conjunto una “enmienda a la totalidad” y refleja la “escasa voluntad” de la patronal para llegar a un acuerdo, de lo que dijo eran “conscientes” al redactarla.