Cristóbal Cano y Antonio Díaz completaron la terna ganadora
Unos dicen que fue por la coincidencia con “las carreras” -se celebraba la trigésima edición de la Subida a la Mota desde primera hora de la mañana- mientras que otros apuntaban, más bien, al cisma con la anterior organización, que brilló por su ausencia en el evento. La cuestión es que la octava edición del Campeonato de Tiro con Honda -esta vez desprovisto del sonoro apelativo de mundial- se resintió de la asistencia de público, que años pasados llenara las sombras de las nogueras en la Hoya de Charilla.
En lo que a la competición estrictamente se refiere, el charillero de nacimiento y valenciano de adopción, Manuel Gallardo García, volvía a hacerse con el triunfo absoluto, tres años después de su primera victoria, en 2006. Gallardo se convertía, de paso, en el más laureado participante del certamen, ya que en el año 2007 también estuvo presente en la terna de finalistas, siendo entonces subcampeón.
En cualquier caso no se lo puso fácil un más que inspirado Cristóbal Cano, otro charillero que dejó en lo más alto el pabellón local. El podio lo completó Antonio Díaz, único propiamente alcalaíno entre los tres maestros.
Merma notable, igualmente, en la participación total, que bajaba hasta los 35 contrincantes, prácticamente la mitad que en los mejores tiempos. Los organizadores de esta edición, vecinos de la Hoya de Charilla, hacen propósito de enmienda y lanzan el deseo de que el Ayuntamiento vuelva a implicarse en un certamen que pretenden recuperar “el espíritu de lo rural”.