El Zoo de Jerez es uno de los más antiguos de España. El principal impulsor de la idea fue Alberto Durán Tejera. El 10 de febrero de 1953 abrió sus puertas
El Zoo de Jerez, o Tempul como se le conoció coloquialmente desde el principio de sus días, ha obtenido el Premio Andalucía a la Conservación de la Naturaleza, concedido por la Junta de Andalucía.
El Zoo de Jerez es uno de los más antiguos de España. El principal impulsor de la idea fue el concejal de Parques y Jardines, Alberto Durán Tejera. El 10 de febrero de 1953 abrió por primera vez sus puertas con la denominación de Parque Zoológico y Jardín Botánico Alberto Durán. Los primeros animales eran una pareja de avestruces, un mono y un águila real.
Bajo la dirección de José María Aguilar, actualmente acoge en sus instalaciones a 1.300 animales pertenecientes a 250 especies diferentes de los cinco continentes. Su riqueza no se ciñe sólo a la fauna. Las instalaciones del Zoo se sitúan en unos antiguos jardines, por lo que el Parque presenta más de 400 plantas, entre ellas un cedro del Himalaya que data de hace 130 años.
El Zoo de Jerez desarrolla una serie de proyectos de reproducción en coordinación con los principales zoos de Europa. Estos proyectos basan sus actuaciones en conseguir poblaciones viables de cara a su futura reintroducción en sus hábitats naturales.
Numerosos proyectos
El Zoo de Jerez desarrolla ahora mismo cerca de treinta proyectos con especies de animales en peligro de desaparición. No es fácil que se reproduzcan y entonces "se intenta saber si tienen carencias en la alimentación, temperatura o en las instalaciones", comentan sus responsables.
El programa del lince ibérico se gestiona a través de un convenio de colaboración entre la Junta de Andalucía y el Ministerio de Medio Ambiente y en él colaboran numerosas instituciones y expertos. Por el momento se desarrolla en el Centro de Cría de El Acebuche (Doñana), desde el que se dirige el programa y en el que se obtuvo en la primavera del 2005 la primera camada de lince ibérico en cautividad, y en el Zoobotánico de Jerez, en el que se han criado varios de los cachorros que forman parte del programa.
Uno de los pilares del Zoo de Jerez es la investigación y la educación. Los escolares pasan por el Aula de Educación antes de iniciar la visita para aprender sobre un tema que elige su profesor, sea la reproducción, fauna ibérica, alimentación del animal o cualquier otro.
“Se explica el funcionamiento del parque, para que los niños sepan que no vienen a un circo, sino a un lugar en el que los animales están para que sean observados y estudiados. Una vez que pasan por el aula cambia un poco su mentalidad y son más respetuosos”.