El condenado a 20 años y medio de cárcel por el asesinato de su compañera sentimental en Dúrcal, en la comarca de El Valle de Lecrín, clavándole un cuchillo "al menos hasta en cuatro ocasiones" el 14 de agosto de 2018, ha recurrido ante el Tribunal Supremo la sentencia en que el Superior de Justicia Andalucía (TSJA) rebajó en dos años la condena que inicialmente le impuso la Audiencia Provincial de Granada, tras un juicio con jurado popular.
Así lo han indicado a Europa Press fuentes del caso consultadas sobre este recurso de casación para la revocación de parte de la condena, que en principio fue de 22 años y medio por sentencia de la Audiencia Provincial de Granada, y rebajada en dos por el TSJA el pasado junio, una decisión por la que cabía recurrir ante el Supremo.
Este individuo, de nacionalidad marroquí, tenía permiso de residencia comunitaria, y mantenía una relación con la víctima, que estaba a punto de cumplir 21 años cuando falleció, desde 2013, y convivía con ella en Dúrcal desde que ella fue mayor de edad, habiendo tenido un niño, inscrito solo como hijo de la madre.
Fue condenado también a inhabilitación para ejercer la patria potestad y habrá de cumplir orden de alejamiento de al menos 500 metros y de prohibición de comunicación por 30 años al niño.
Los miembros del jurado consideraron probado que el condenado conducía un vehículo sobre las 00,00 horas de ese día por los alrededores de Dúrcal, con su pareja en el asiento de copiloto, y que, en un momento dado, "con el evidente propósito de causarle la muerte a su pareja, esgrimió un cuchillo con un filo de 13,5 centímetros de largo y 2,9 centímetros en su parte más ancha, y se lo clavó" a ella "al menos hasta en cuatro ocasiones".
La víctima "no pudo en forma alguna defenderse por lo repentino e inesperado de la acción", al encontrarse dentro del coche, y "eliminando la forma de proceder del acusado toda posibilidad de reacción" por su parte. Una de las heridas le perforó el pulmón izquierdo, "provocando pérdida masiva de sangre hacia cavidad torácica izquierda y hacia el exterior del cuerpo", y, como consecuencia, su muerte.
Fue sobre las 0,30 horas del 14 de agosto de 2018 cuando el condenado llegó con ella en el vehículo al centro de salud de Dúrcal, "tocando el claxon", y "gritó" al médico y celador de guardia "cúrala". "A preguntas del facultativo sobre el origen de las lesiones", habría esbozado la palabra "puñalada" para marcharse luego corriendo.
Los médicos no pudieron hacer nada por salvar la vida de la víctima, que "ya había fallecido", detalló en su momento la fiscal, que pidió también, una vez elevadas a definitivas sus conclusiones, la inhabilitación especial para ejercer la patria potestad del menor, así como la prohibición de acercarse a él a menos de 500 metros, y de comunicarse con el mismo, durante 30 años.
Con motivo del tercer aniversario del asesinato, el primero tras la condena, la asociación de mujeres La Volaera pidió el cumplimiento íntegro de las condenas en casos como el del hace este sábado tres años.
En declaraciones a Europa Press, la presidenta de La Volaera, María Martín, señaló que "jamás" hay que "bajar la guardia" ante la violencia machista, y se preguntó quién, pese a la sentencia, "devuelve la vida" a la madre, que es parte de esta asociación, la hermana y el hijo menor de la víctima.