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Arcos

El Jédula cede ante un Villamartín que no perdonó en la recta final

Chesco y Lirio marcaron los goles visitantes y Jorge Jiménez el de los blanquiverdes

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  • El Jédula sufrió y perdió. -

C.D. JÉDULA                 1
U.D. VILLAMARTÍN       2 

–Jédula– Gabri, Marcos, Raúl, Manolo, Colorao, Borja, Isidoro (Jorge Rodríguez, min. 68), Albino (Collantes, min. 13), Jorge Jiménez, Paquito De los Reyes (Jesús, min. 68) y Vázquez (Quintáns, min. 74). 
–Villamartín– Casqui, Ilde, Álvaro, Lirio, Darío, Ismael, Kilian, Chesco (Cuervo, min. 70), Moi Fernández (Deivid, min. 91), Moi Tenorio (Nene, min. 63) y Sierra (Joaquín, min. 90). 
Goles: 0-1 (8’) Chesco. 1-1 (30’) Jorge Jiménez. 1-2 (85’) Lirio. 
Árbitro: Fuentes Cordero (Jerez). Amonestó a Borja por el C.D. Jédula y a Darío, Lirio, Moi Fernández e Ismael por la U.D. Villamartín, y expulsó al auxiliar visitante Manuel Holgado.
Incidencias: Cuarta jornada de Primera Andaluza. Unos 100 espectadores.
 

El Jédula recibió un serio revés el pasado domingo en su propio feudo en la visita de la U.D. Villamartín, el otro equipo de la comarca de la Sierra, los dos únicos que la representan en la “nueva” Primera Andaluza, que solo cuenta con escuadras de la provincia de Cádiz.

El conjunto blanquiverde, que esta temporada entrena Juanjo Zambrano, recibió dos duros golpes en el primer cuarto de hora del encuentro: encajó el primer tanto a los ocho minutos de iniciarse la contienda y se quedó sin una de sus principales bazas de esta temporada, Albino, que tuvo que abandonar el campo lesionado en la rodilla izquierda en una desafortunada acción con un jugador contrario cayendo en mala postura y lastimándose en una zona muy delicada para un futbolista. Dos reveses en tan poco espacio de tiempo que al conjunto local le dejaron bastante tocado.
La lucha se entabló en el centro del campo y en la línea de tres cuartos. “Nino” metió en la parcela ancha a Ismael ‘Zorro’ y Kilian, su doble pivote, retrasando a Moi Fernández y a Sierra en labores centrocampistas, acumulando efectivos para desconectar el juego de creación local, que se vea impotente para traspasar con facilidad las líneas villamartinenses. Chesco adelantaba a la UDV a pase de Kilian en el minuto ocho y los de la Villa iban administrando su ventaja con cierta comodidad. En el bando local, la lesión temprana de Albino alteraba los planes ofensivos de Zambrano.

Los jugadores de banda locales como Isidoro o Paquito De los Reyes apenas si podían desbordar a sus marcadores, Ilde y Darío, que se mostraban muy eficaces, así como la pareja de centrales visitantes, que integraban el exarcense Álvaro Ramírez y Lirio. Ni Jorge Jiménez ni Vázquez encontraban resquicio alguno por donde colarse para inquietar a Casqui. El empate, si se llegaba a producir, no podía llegar más que a balón parado, como así fue. Jorge Jiménez, el eterno capitán del Jédula y que también llegó a vestir la camiseta del Villamartín tiempo atrás, se lució como en él es habitual en un golpeo de balón marca de la casa desde fuera del área batiendo al portero visitante Casqui, que nada pudo hacer por evitar el golazo. El Jédula igualaba el marcador en un momento clave de la primera parte, en el minuto 30, y aún quedaban dos tercios de partido para intentar la remontada.

Una vez pasado el primer cuarto de hora del segundo periodo, y viendo que su equipo no conseguía poner en peligro al portero visitante, Zambrano apostó por dar entrada a toda su muchachada atacante para voltear el marcador. Quintáns, Jesús y Jorge Rodríguez salieron al terreno de juego con todas las ganas y la intensidad necesarias como para dar la vuelta a la tortilla definitivamente, pero las ocasiones no llegaban. El Villamartín se mostraba firme atrás y en la parcela ancha y, no conforme con el empate, adelantaba líneas buscando el gol del triunfo. Lo tuvo Cuervo en su bota izquierda en el minuto 79, pero falló estrepitosamente, y un minuto después, Sierra, que había hecho lo más difícil, disparó ingenuamente con todo a favor para decantar la balanza para los de la ‘Villa’. Tendría que ser a balón parado como llegase la solución. En un córner del Villamartín, Lirio, solo en el segundo palo, cabeceaba picando abajo el centro de Sierra batiendo a Gabri, que no pudo evitar el mazazo. Los visitantes conseguían ganar el derbi serrano y lograban su segunda victoria liguera. El Jédula, en cambio, acumulaba su tercera derrota en cuatro jornadas. Preocupante, sí, pero aún queda mucho tiempo por delante para enmendar yerros, aunque el inicio de los blanquiverdes en la nueva competición no es el esperado por todos.

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