Sin agua potable, con el viario público en “un lamentable estado”, con deficiencias en servicios públicos tan básicos como la recogida de residuos sólidos urbanos y la seguridad, sin autobús urbano y con el proceso de regularización de las viviendas de un asentamiento que se remonta “a la edad del Bronce” paralizado desde hace décadas. Esta es la situación actual de la pedanía barbateña de Zahora y esas son las demandas, ya históricas, de la Asociación de Vecinos Costa de la Luz, que cuenta con casi 300 asociados, “todos vecinos y vecinas de Barbate que se sienten abandonados” por las distintas administraciones, entre ellas “nuestro Ayuntamiento”.
Hace más de diez años que el firmante de este reportaje mantuvo un encuentro con dicha asociación de vecinos. Y lo primero que quiero destacar es que tristemente sus reivindicaciones siguen siendo las mismas... “no se ha hecho nada, estamos incluso peor porque las infraestructuras, como calles o contenedores de basura, se han ido deteriorando con los años”. Además, el sueño de regularizar la zona sigue siendo más bien una pesadilla.
Para que nos expliquen qué ocurre, hemos hablado con Antonio Casado y José Antonio Mármol Román, presidente y secretario respectivamente de la citada A. VV. Costa de la Luz. “Estamos ahora mismo como siempre, con el plan vigente de 1995 porque el Ayuntamiento no desarrollado, ni ejecutado, ninguna de las herramientas que ha tenido para regularizar Zahora”, señala José Antonio Mármol para añadir que “el plan especial caducó por inactividad del Consistorio, tal y como recoge el auto que está en los juzgados. Tampoco inició un nuevo avance… luego llegó el decreto de la Junta de septiembre de 2019 y ya han pasado dos años tampoco han hecho nada”.
Ese decreto “permitía hacer planes especiales de manera urgente para regularizar asentamientos como Zahora”. De hecho, Mármol explica que “a nosotros no nos sirven los AFO (Asimilados Fuera de Ordenación) porque Zahora es un asentamiento, por lo que es necesaria la elaboración de un plan especial que regule la zona y establezca los parámetros urbanísticos” para su posterior regularización.
Respecto a la modificación puntual del PGOU aprobada de manera inicial en el pleno de diciembre, “nosotros estamos fuera de la misma. El Ayuntamiento la ha aprobado para reprogramar en teoría los suelos del municipio, pero su objetivo real es establecer un marco urbanístico legal para la construcción de los diferentes macroproyectos y complejos turísticos, al tiempo que incluye todos Los Caños como suelo urbano no consolidado, eso si llega a buen puerto la modificación”.
Exigen tutela administrativa
Por estas razones “hemos presentado alegaciones, porque el Ayuntamiento arrincona y discrimina a la población de Zahora, dejándola en un segundo plano” y recuerda que su asociación ya solicitó una modificación del PGOU en 1999 pero “nos dijeron que no era factible porque había muchas viviendas, aunque luego sí lo fue para el proyecto hotelero del Faro de Trafalgar”.
Más tajante se muestra Antonio Casado... “a ese plan que ya caducó también habíamos presentado alegaciones porque aparecíamos como una metástasis cancerígena en la memoria del mismo”. El problema “no es solo Zahora, también San Ambrosio y de parte de La Oliva, hablamos de una realidad habitacional de los barbateños que no vivimos en el núcleo urbano... hablamos de una falta total de tutela administrativa”.
Por eso “exigimos el derecho a la tutela administrativa de nuestros gestores, de los que trabajan, entre comillas, para el pueblo”, una tutela que “nunca ha existido” en un municipio que en su opinión “nunca ha hecho un reconocimiento a sus trabajadores, que son los que sostienen el pueblo y Zahora es una parte de la población a la que no se nos quiere reconocer ni como barbateños”.
Ausencia de gestión
E insiste en que “no quiero entrar en guerra política pero el problema de Barbate es la gestión. Una gestión que ha conllevado una deuda de más de 80 millones de euros que en realidad no es del pueblo, es del Ayuntamiento y ha sido generado por sus gestores municipales”.
Dicha deuda es “de la empresa municipal de Barbate que tiene 400 trabajadores y sus principales gestores se han dedicado a saquearla como he visto con mis propios ojos” y “la situación que padece Zahora es parte de ese saqueo porque aquí se sigue construyendo”, mientras que “el Ayuntamiento se dedica a grandes operaciones urbanísticas al tiempo que fomenta la economía sumergida y la competencia desleal”.
Casado, que es propietario de un hostal, explica que “los negocios que aquí están legalizados, lo están a través de la Junta, no por nuestro propio Ayuntamiento. Llegué con 23 años a este paraíso pero enseguida me percaté que también era un cortijo”.
Lamenta que “la administración abogue por grandes macroproyectos realizando una modificación a un PGOU de 1995, cuando tiene a su población partiéndose el lomo, arriesgando su patrimonio”.
Por su parte, Mármol explica que, ante esta situación, “presentamos todos los años varios escritos y tratamos nuestras demandas en reuniones periódicas que mantenemos con el Ayuntamiento (la próxima el 14 de febrero)”, unos encuentros que “hemos logrado gracias a una orden judicial, porque de lo contrario no tendrían lugar”.
¿Recogida de basura?
A pesar de ello, Zahora “funciona” turística y económicamente. “Cada año vienen entre quince y veinte mil personas”, aún así “no tenemos agua potable. Ni se ha avanzado en la regularización mientras que sigue construyendo. La recogida de basura es lamentable, aunque mejora algo en verano, cuando contamos incluso con un barrendero. Y eso a pesar de que pagamos el IBI, la tasa de basura...”.
Mármol se centra en la recogida de basura, “cuyo servicio es indecente. No contamos en esta época ni con un barrendero y si antes había ocho puntos de recogida con contenedores, ahora hay solo cinco, y los contenedores están en un estado lamentable”.
Antonio Casado asegura que “nuestro espejo es Conil, donde la diferencia es abismal”. La zona del diseminado del campo cuenta con viviendas irregulares pero “tienen agua, parada de autobús urbano, electricidad... y es que el Ayuntamiento, aún siendo suelo rústico no urbanizable, les ha dado un trato totalmente distinto, aportándoles servicios dignos como el agua, el saneamiento y la recogida de basura. La diferencia es abismal... nosotros parece que estamos en el culo del mundo”.
En su opinión, esta situación que se vive en Zahora es “un caldo de cultivo para la corrupción y la especulación”, y “las asociaciones de vecinos somos un grano en el culo porque juegan con el miedo de la gente para extorsionarla y así seguir especulando”.
Sin agua potable
La A. VV. Costa de la Luz “lleva toda la vida luchando. Presentamos alegaciones, presentamos quejas al Defensor del Pueblo y también ante la Fiscalía”, logrando sentencias como la que confirma que “el Ayuntamiento es el responsable de que aquí no tengamos agua potable”.
Y es que el agua, o mejor dicho su ausencia, es el principal problema. “La que tenemos no es apta para el consumo y se está salando cada año más” a consecuencia de la sobreexplotación de los acuíferos, que de seguir así “en unos años esto será un desierto”.
No tienen agua a pesar de que “ya en 2004 las tuberías pasaban por la carretera”. Casado explica que “pasa por la puerta de mi negocio” para luego esquivar “a Zahora” y continuar para dar agua a los camping y con la proyección de abastecer a los dos grandes proyectos turísticos que se pretenden construir en la zona, el complejo turístico Trafalgar-San Ambrosio, con dos mil plazas hoteleras y 300 viviendas turísticas; y el complejo hotelero en la Dehesa junto a los llanos de Trafalgar, con otras dos mil plazas hoteleras proyectadas.
Proyectos que en opinión de estos vecinos “solo dejarán comisiones para unos cuantos” y que “casualmente ya tienen luz y agua. Además entran dentro de la modificación del PGOU para que los suelos sean urbanizables”. En conclusión, respecto al agua, “el tema da para que se investigue en profundidad”.
Depuradora
Otro tema es la depuración de aguas. “No hemos visto nada de nada, lo que sabemos es que en 2011 la Junta publicó en el BOJA el proyecto para la estación depuradora de El Palmar, Zahora y Caños... está ahí aprobado pero no hay nada de nada.
De hecho, reiteran que “incluso en la memoria de los citados macroproyectos se recoge que pueden comenzar sin depuradora, solo les obliga a canalizar sus aguas a la misma cuando esté construida”.
El pesimismo se resume en la siguiente frase: “Vamos a ver. Si Barbate aún no tiene una depuradora en condiciones. Si Barbate echa la mierda en la playa, qué esperanzas vamos a tener nosotros”.
Tampoco tienen muchas esperanzas puestas respecto a la nueva Ley de Impulso para la Sostenibilidad del Territorio de Andalucía (LISTA). “Pensamos que lo que busca es dar cabida a macroproyectos para que estén amparados por la ley. Además, el problema es que el Ayuntamiento no trabaja sobre la misma para dar solución a la regularización de Zahora, como tampoco lo hizo después del decreto de la propia Junta”.
Promesas incumplidas
Mármol tiene la impresión de que la actitud del actual equipo de Gobierno se basa en “promesas incumplidas. Días atrás me llamó el alcalde, para una reunión. Nos habló de un plan especial pero es algo que llevamos hablando desde hace mucho tiempo y ojalá algún día sea verdad”.
La asociación, que cuenta con 296 socios, recuerda que en Zahora hay más de mil viviendas, además de 70 negocios que “se sienten ninguneados y tratados como ilegales a pesar que, por ejemplo, en mi caso, acabo de pagar 5.400 euros de IBI”, señala Casado.
En verano la zona genera unos mil empleos, “sin contar las viviendas turísticas, que como no están regularizadas, forman parte de la economía sumergida que como hemos dicho se fomenta”. Y en invierno, entre albañiles, electricistas, locales de hostelería que permanecen abiertos, “hay entre 500 y 600 puestos de trabajo”, a los que “también se ningunean. No tienen ni un autobús para ir y venir. Además, en la construcción trabajan asustados”.
Opinan que “para poner servicios no es necesario una regularización, como se ha hecho en Conil. No hay que ir muy lejos para ver una administración que trabaja para su pueblo y otra que trabaja contra el pueblo”.
Para concluir este encuentro, Mármol realiza una reflexión... “es acojonante, y perdón por la palabra, que la Junta contemple esos macroproyectos en el término municipal de Barbate cuando aún hay vecinos que no cuentan con agua potable. Y lo que es peor, se sabe que la situación del abastecimiento de agua empeora cada año. Se sabe que en unos años se producirán cortes en el suministro en las principales ciudades y pueblos. Y aún así se sigue apostando por complejos con campos de golf mientras el pueblo no tiene agua. ¿Por el turismo? ¡Pero si aquí en verano ya no cabe ni un alfiler!”.