Mientras esta pasada semana, en Estados Unidos se conmemoraba el 4 de julio de 1776, día en el que se aprobó la redacción de la Declaración de Independencia de este país, en Cádiz y su Bahía, los extrabajadores de la factoría de automoción Delphi volvían a echarse a la calle pero no para celebrar nada, sino para realizar su enésima protesta porque cuando precisamente se cumplen cinco años de aquel fatídico 4 de julio de 2007, aún quedan cerca de quinientos afectados por el cierre de la citada empresa.
Se acaban de cumplir cinco años desde que la empresa Delphi decidiera cerrar su factoría de Puerto Real, dejando sin empleo a cerca de dos mil trabajadores. Aquel 4 de julio de 2007 fue un punto de inflexión para la industria gaditana, que desde entonces ha entrado en una dinámica de declive atroz que se mantiene a día de hoy. Gadir Solar, Navantia, Alestis Aerospace, Visteón, son empresas que o bien ya han cerrado sus puertas, o como es el caso de Navantia, apenas tienen carga de trabajo.
Algunas cifras, como las aportadas por la Encuesta de Población Activa, hablan que precisamente en estos últimos cinco años, en la Bahía de Cádiz, el sector industrial ha perdido cerca de diez mil puestos de trabajo.
Otras cifras hablan de que son cerca de 40.000 personas las que han perdido su empleo en este sector. En cualquier caso, ambas reflejan claramente el drama que vive la industria en Cádiz y su Bahía, y tal y como comentan esta semana los principales sindicatos, el punto de inflexión comenzó precisamente aquel 4 de julio.
Y como a perro flaco todo son pulgas, el cierre coincidió con el inicio de la devastadora crisis económica, la cual también sigue vigente en la actualidad.
Precisamente esta semana, en la que se cumplían cinco años de aquel cierre, el colectivo de extrabajadores de Delphi, convocados por los sindicatos inmersos en el conflicto, CCOO, UGT, CGT y USO, volvieron a dejarse ver en la calle. El motivo en esta ocasión es que este mes todavía no han percibido su retribución debido a que la Junta de Andalucía no ha pagado a la Fundación Universidad-Emprende de la UCA (Fueca), que se encarga del plan de formación, el cual concluye este próximo mes de septiembre. Situación que si no se desbloquea, conllevará nuevas manifestaciones la semana entrante, y es que “estamos en el límite, muchos de nosotros dependemos exclusivamente de ese dinero para seguir adelante”.
Recolocaciones inexistentes
Los planes de recolocación y de reindustrialización prometían miles de empleo, pero se dieron de bruces con la crisis y a día de hoy no son más que promesas que nunca se llegaron a cumplir. De hecho, Gadir Solar, una empresa que recolocó, aprovechando incentivos públicos por parte de la Junta, a un centenar de extrabajadores de Delphi, ya ha cerrado sus puertas, dejando en la calle a toda la plantilla, incluidos estos ‘recolocados’.
“Esta semana estamos protestando ante impago de la Junta a Fueca”, explica a este medio Antonio Montoso, representante de la UGT en el conflicto de Delphi. Al respecto, el jueves, tras amenazar este colectivo con encerrarse en las instalaciones de la Delegación Provincial de Empleo de la Junta en Cádiz, “nos dijeron que todo el tema del pago ya está fiscalizado y preparado en la Consejería de Empleo, y está simplemente a la espera de que haya fondos en la Consejería de Hacienda para proceder al pago”. Ahora esperan que esta promesa se cumpla.
Lo único que ha variado este 2012 respecto a 2007, es que ahora en la Junta de Andalucía gobierna junto al PSOE, en coalición, Izquierda Unida, partido político que siempre se ha mostrado cercano a las reivindicaciones del colectivo de extrabajadores de Delphi. Al respecto, y cuestionado si ello ayudará a resolver de una vez por todas el conflicto, Montoro señala que “por lo menos esperamos que haya más comunicación, pero hasta ahora, la verdad, no se está dando”.
Actualmente “todavía quedan unos quinientos afectados que no han sido recolocados, de los que unos 480 están asistiendo a los cursos de formación que imparte Fueca, que centraliza todas estas acciones formativas”.
Montoro reconoce que nadie esperaba que el conflicto surgido hace cinco años se alargase tanto en el tiempo, aunque “la verdad es que nos ha cogido el tema de la crisis, hay que tener en cuenta que el protocolo con la Junta se firmó en 2007, cuando el tema de la crisis ni se olía”, añadiendo que “cuando firmamos ese protocolo, existía un número de empresas que eran reales y que podían paliar las consecuencias del cierre de la factoría, pero bueno, todas estas empresas, la mayoría, han ido cayendo a causa de la crisis. Incluso alguna ha caído una vez instalada como ha sido el caso de Gadir Solar, y todo ello lo que hace es agravar este problema”.
En este sentido, Gadir Solar absorbió cerca de un centenar de trabajadores procedentes de Delphi, los cuales no han vuelto al protocolo, “porque estamos a expensas de la Comisión de Seguimiento establezca que estos empleados puedan volver a acogerse al protocolo firmado en su día con la Junta”.
Al citado protocolo de actuación sellado tras el cierre de la factoría se adhirieron 1.904 trabajadores, de los cuales, más de quinientos siguen, cinco años después, en el protocolo. Los que se han salido han sido gracias a las recolocaciones y las prejubilaciones. En este último aspecto, Montoro señala que “las prejubilaciones de momentos se están cobrando, pero aquí hay que vivir mes a mes”.
En este sentido, de los 1.904 que firmaron el protocolo de actuación, a principios del presente año habían causado baja unos 1.344 antiguos operarios. De este total, aproximadamente 468 han podido ser recolocados en otras empresas, mientras 118 desarrollaron Proyectos Personales de Inserción. Estos proyectos conllevaban abandonar el protocolo a cambio de una ayuda económica de 45.000 euros para aquellos decidieron abandonar el protocolo antes del 28 de febrero de 2011. Para los que se fueron tras esa fecha, la cuantía a recibir fue de 30.000 euros.
Formación y terrenos
El 30 de septiembre concluyen a su vez estos cursos de formación que imparte la Fueca. La continuidad de los mismos “forma parte de las negociaciones que estamos manteniendo actualmente. Lo que pasa es que como ha surgido el problema del impago, ahora estamos centrados en que la gente cobre, que es el principal problema porque es prácticamente el único medio de subsistencia que tienen estos extrabajadores. Dependen de ese pago muchas familias, así de duro”.
Otra cuestión es la situación de los terrenos donde se ubicaba la factoría en el Polígono El Trocadero, en el término municipal de Puerto Real, que hoy es una sombra de lo que fue hace unos cinco años. Sobre este punto, Montoro reconoce que “hay muchos rumores, bastantes rumores, pero son eso, rumores, no hay nada”, aunque puntualiza que “entendemos que si hay algo debe ser algo importante y no lo vamos a saber hasta última hora. Hay que tener en cuenta que en esos terrenos se tendría que instalar una empresa bastante sólida. Hablamos de mucho terreno y mucho espacio”.
Eso sí, “la idea sigue siendo, y es por la que vamos a seguir peleando, es que allí se instale una empresa que sirva para revitalizar el sector industrial en la Bahía de Cádiz, no sólo que nos sirva a nosotros. Allí llegaron a trabajar 3.000 empleados y nosotros hablamos ahora de unos 500 empleados a recolocar”. Montoro insiste de todas formas en que “nadie nos ha comunicado nada al respecto, no sabemos si hay empresas y qué empresas están interesadas. Lo que hay se está llevando a cabo con cautela porque ya ha pasado otras veces de que se ha ido al traste la operación una vez que han salido a la luz nombres… si hay algo al respecto, estoy convencido de que se está llevando con bastante cautela”.
Desde los sindicatos, que reconocen el mal momento que vive el sector industrial en la Bahía, creen que el futuro debe pasar por una apuesta decidida por “la industria. Y cuando hablamos de industria, hablamos de empresas de cien o doscientos trabajadores, que generen empleo directo e indirectos, a través de empresas auxiliares como las de limpieza o transporte. Mientras que no lleguen este tipo de empresas, la situación seguirá igual, porque para qué queremos polígonos industriales llenos de talleres que no tienen a quien ofrecer sus servicios. Hacen falta empresas sólidas que generen empleo y que a su vez fomenten el empleo auxiliar. Cuando el cierre de Delphi, que ya estaba dejada desde meses atrás porque era un cierre premeditado, había en plantilla 1.500 personas y unas 500 personas pertenecientes a empresas auxiliares. Eso, aunque suene a utopía, es lo que hace falta. Este tipo de empresas repercuten en la economía de la zona donde se instalan y generan mucha actividad alrededor”.
Eso sí, aunque hayan pasado cinco años, el colectivo de extrabajadores de Delphi tiene claro que “no dejará una oportunidad para manifestarse y reivindicar nuestros derechos”.
Nuevas protestas por el impago en la formación
El colectivo de extrabajadores de Delphi acudió este viernes a la convocatoria que los sindicatos inmersos en el conflicto (CCOO, UGT, CGT y USO) habían hecho ante la sede de la Delegación Provincial de Empleo de la Junta en Cádiz. Allí, tras ser informados de los últimos movimientos para “desbloquear los pagos”, los afectados decidieron trasladar su concentración ante las sedes del PSOE, del PP y por primera vez, de IU para “exigirles que, de una vez, cumplan con los compromisos que han ido adquiriendo”.
Fuentes sindicales han avanzado algunas de las medidas acordadas para la semana próxima en protesta por la falta de pagos. Y es que, según han destacado, este mes todavía no han percibido su retribución debido a que la Junta no ha pagado a la Fundación Universidad-Emprende de la UCA (Fueca), que se encarga del plan de formación.
De esta manera, representantes de los cuatro sindicatos tienen previsto desplazarse el lunes hasta Sevilla para reunirse con responsables de la Administración autonómica a fin de alcanzar una solución a los pagos y abundar en la necesidad de que se celebre una comisión de seguimiento de los asuntos de Delphi para abordar otras cuestiones que son “vitales” para el colectivo. Según comentan, finalmente será el miércoles cuando se celebre la reunión prevista entre el director general de Relaciones Laborales, Javier Castro, el gerente financiero de la Fueca y un responsable de la Consejería de Hacienda para "liberar los ingresos correspondientes”.
Más que “buenas palabras”, resultados
En la semana que el el conflicto de Delphi cumplía cinco años, epresentantes sindicales se reunieron en Sevilla con el coordinador general de IULV-CA y vicepresidente de la Junta de Andalucía, Diego Valderas, quien se ha comprometido a contactar “de inmediato” con la Consejería de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo y con la de Hacienda a fin de que “se libere” el dinero para la Fundación Universidad-Empresa de la Provincia de Cádiz y el colectivo “pueda comenzar a cobrar”, siendo esta la cuestión “más urgente” para los afectados.
Los sindicatos le han trasladado a Valderas la “urgencia” de convocar una reunión de la comisión de seguimiento de los asuntos de Delphi debido a la “vital importancia” de los asuntos a tratar, como es “la necesidad de aclarar qué va a ocurrir a partir de septiembre”, cuando concluye el plan de formación.
Asimismo, para que la comisión de seguimiento “tenga sustancia y sirva realmente para resolver las cuestiones que planteamos”, los representantes sindicales han propuesto crear unos “grupos de trabajo” que mantengan reuniones previas para “ir desbloqueando” algunos aspectos, sobre todo teniendo en cuenta que la comisión no se reúne desde noviembre de 2011 y “prácticamente no ha habido contacto desde entonces con la Junta”.
Estos grupos de trabajo evitarían que la comisión de seguimiento sea “una pérdida de tiempo”, máxime cuando “está en medio agosto, en el que todo está paralizado”, y el mes de octubre se plantea con “incertidumbre” para el colectivo.
A este respecto, comentan que Valderas les ha asegurado que va a trasladar la cuestión a los responsables de las consejerías implicadas y que espera poder darles una respuesta “la próxima semana”.
Por otra parte, tanto el vicepresidente de la Junta de Andalucía como el parlamentario Ignacio García, que le ha acompañado durante la reunión, han ratificado ante sus interlocutores “el compromiso adquirido en su día de apostar por los antiguos terrenos de Delphi”.
Finalmente, los representantes sindicales han valorado la actitud de Valderas, si bien han advertido que “estamos cansados de buenas palabras y, después de cinco años, ya sólo queremos resultados”.
