Salvador Mera, tras su reelección la semana pasada como secretario general del sindicato UGT en Cádiz con el respaldo del 59 por ciento de los votos, frente a la candidatura encabezada por Antonio Montoro, extrabajador de la extinta factoría de Delphi, aseguraba que seguirá “luchando con ilusión y garra” contra el desempleo que azota la provincia gaditana “realizando propuestas”.
Tal y como explica a este medio, “en general, las líneas de trabajo serán las mismas que hasta ahora, dado que estas líneas nos las marcan desde la confederación, el programa de acción es el mismo. En cuanto a Cádiz, aquí tenemos que seguir luchando por la industria y por el empleo, con el objetivo de poder salir de esta situación marcada por el deterioro en el empleo que padecemos”.
Salvador Mera reconoce que “la situación de la industria en Cádiz y su provincia ha empeorado en los últimos años. Los mantenimientos generales y habituales de las industrias no se están haciendo, lo que repercute en el empleo, que no crece, sino al revés”.
En este aspecto, la marcha de industrias como Altadis ha caído en el sindicato “como un jarro de agua fría. Nosotros planteamos una legislación europea y mundial para que las industrias no estén allí donde peores condiciones laborales existan. Altadis lo que hace es desplazarse a otro país donde los salarios son más bajos que en este país y en esta provincia, lo que se traduce en un atraco a mano armada contra los trabajadores. En este sentido, los trabajadores sienten una desilusión enorme, muy fuerte, porque han dado los mejores años de su vida a su empresa, a su trabajo, y de repente ven que la empresa se marcha a Polonia porque la mano de obra es más barata, y no pasa nada”.
Casos como Altadis tienen precedentes en otras empresas, como fue el caso de Delphi, por eso aboga por ser “más sencillos y más ocurrentes. El capital de Cádiz tiene que invertirse en la provincia, que se quede en la provincia, porque de lo contrario provoca un desánimo importante y mucha desilusión entre la gente”.
Respecto a los últimos datos sobre el desempleo, con una bajada del paro en casi todos los municipios de la provincia y en Cádiz capital, no son como para tirar cohetes, según el propio Mera, ya que en su opinión “son coyunturales, temporal y estacional, algo que se repite todos los años porque en definitiva no hay una estructura productiva para que cambie la empleabilidad. Lo que tenemos es la estacionalidad de sectores como la hostelería y un poco la agricultura, que ha repuntado un poco. El empleo público también ha caído”.
Por eso teme que “una vez que pase el verano estemos igual o peor que antes, porque los salarios son peores, más bajos, porque cuando hay tanta necesidad el patrón impone sus condiciones. Sabemos que hay patrones que miran por sus empleados, pero también hay cientos de ellos que se aprovechan de esta coyuntura”.
Por último, Salvador Mera está convencido de que “sin lucha no hay soluciones. La solución pasa por alzar aún más la voz. Está claro que la solución no pasa por estarse quieto o esperar en casa o en la plaza del pueblo.
La solución pasa por echarse a la calle y reivindicar otro modelo político, otro modelo económico. La lucha tiene que estar en la calle, tenemos que echarnos todos a la calle porque esta situación no se la puede permitir ni esta provincia, ni esta región, ni este país”.
