El informe, financiado por la Fundación Telefónica, recoge que el 35,5% de los estudiantes declara que nunca usa internet en las aulas y sólo el 17,5% de los profesores que emplea las TIC lo hacen para “cambiar la forma de impartir clase”.
Los currículos educativos, los métodos docentes y los sistemas de evaluación, que guían las actuaciones del profesorado, “no han evolucionado al mismo ritmo que las nuevas formas de acceso a la información y al conocimiento”, indica el avance de conclusiones del estudio, presentadas ayer.
“Comprar un ordenador es fácil, sólo hace falta dinero; generalizar la cultura de uso es lo difícil; acabada la primera fase, la del equipamiento tecnológico, comienza la segunda, el reto de utilizarlo adecuadamente”, enfatizó el responsable del área de debate y conocimiento de la Fundación Telefónica, Jose de la Peña.
El estudio, basado en 18.000 cuestionarios distribuidos en centros públicos y privados, destaca que el 95% de los colegios e institutos están conectados por banda ancha, más que las empresas (93%).
Sólo el 4,9% de los alumnos usa internet a diario en las aulas; el 18,1%, semanalmente; el 24,5%, mensualmente; y el 17%, ocasionalmente.
Los ordenadores con conexión de internet siguen estando en las aulas de informática en la mayoría de los centros (70,1% de ellos), y sólo la cuarta parte los tiene instalados en las que se imparte clase.
Si se trata de los profesores, el déficit de formación se manifiesta en que sólo uno de cada tres se siente capacitado para promover y supervisar grupos de trabajo a través de las TIC o para crear recursos online que puedan ser utilizados en sus asignaturas.
Más del 50% no está habilitado, dicen, para desarrollar proyectos multimedia con los alumnos o evaluar trabajos realizados mediante estas tecnologías, aunque el 57,3% considera que las TIC mejoran la calidad del aprendizaje.
La mayoría (42,1%) de los que no utilizan nunca las TIC en las aulas argumentan que no tienen acceso a ellas.