Incidiendo en el balance negativo de la gestión del Gobierno local durante el pasado año y extendiéndolo al resto del mandato iniciado en 2007, Velázquez consideró como necesaria la “renovación” de la Corporación municipal e insistió en su propuesta de que el 75 por ciento de las contrataciones públicas que se hagan en Chiclana “sean para trabajadores chiclaneros”.
Para el candidato “el Pleno debe ser el lugar donde se solucionen problemas y no un lugar que se ha convertido en un circo, sin debate, solo con enfrentamientos personales”.
El candidato del DIPA también defendió la necesidad de reformar la ordenanza municipal sobre las Áreas de Gestión Básica (AGB) “para aplicarla en función de las necesidades de los vecinos”, apoyó el trazado del tranvía, aunque no las formas de la Junta, y apostó por “un tren que nos una con Cádiz y Algeciras”.