De padre gaditano y madre chiclanera, el empresario José Luis Martín Aragón, lleva el Carnaval en las venas desde que nació. Criado entre la barriada San Pedro, donde hizo sus primeros pinitos de Carnaval, y el barrio de Santa Ana, donde vivían sus abuelos maternos, la barriada de su abuela
María Las Pipas.
José el Niño, apodo con el que se le conoce en Chiclana al empezar en la comparsa de Antonio de la Llave,
el Titi, y conocido en Cádiz como
José de Chiclana, ha estado ligado a esta fiesta desde siempre pasando por distintas agrupaciones, desde la comparsa juvenil
Los niños con las niñas en 1993, hasta
La Boquita Prestá, la última, el pasado año. Quiso tomarse un periodo de descanso, sin embargo, la vida le tenía preparada otra sorpresa, ser pregonero de su tierra natal. Hablamos con el próximo pregonero del Carnaval de Chiclana.
¿Qué significa para ti ser pregonero?
–Es un orgullo, primero porque pregono mi fiesta, con la que me siento identificado, y segundo por lo hago en mi ciudad. Es el culmen de todo carnavalero que quiere a su ciudad, como yo quiero a la mía.
¿Esperabas esta propuesta?
–Yo soñaba con que algún año llegaría. Me habían comentado que ya otros años mi nombre se había puesto encima de la mesa, pero tengo 41 años y también hay muchos compañeros que se merecen ser pregoneros y que tienen una dilatada trayectoria, pensé que me llegaría más tarde, cuando me enteré fue un subidón tremendo.
¿Cómo será el pregón con el que sueñas?
–Llevo escrito ya alguna cosilla. Pretendo que sea el carnaval de mi vida contando de una manera especial y que contará con colaboradores que me son muy importantes.
Decidiste tomarte un tiempo de descanso y resulta que ahora pregonarás esta fiesta.
–Pues ahora más tranquilo. Los ensayos te absorben mucho tiempo, y lo había dejado pausado un tiempo por compromisos familiares, porque al final tienes que compaginar con la familia y resulta difícil, más aún después de la pandemia que mis niños se habían acostumbrado a tenerme todos los fines de semana en casa. Pero también el trabajo que requiere dedicarle mucho tiempo y yo soy empresario. Lo había dejado aparcado, sin embargo la última actuación con la agrupación fue en noviembre, por lo que después de esta noticia solo he estado un mes desconectado del carnaval.
¿Cómo recuerdas el carnaval de tu niñez?
–Yo, en Chiclana, salí en infantiles y juveniles. Toda mi vida. Cuando era niño recuerdo el carnaval como algo muy bonito, sin la cosita de la competencia, cantar por pura afición de verdad y por la amistad. Recuerdo que íbamos a ensayar también para estar un rato con los amigos, añoro también el miedo de las primeras veces cuando tenías que actuar ante el público. Los concursos en el antiguo cine de Chiclana. Ya cuando entras en la adolescencia es más complicado, porque tu voz va cambiando y no sabes aún dónde ubicarte, aunque funcionaba muy bien con las chavalitas de esa edad.
¿Y cómo recuerdas el carnaval de Chiclana de aquellos años?
–Yo el último año que salí aquí fue en 2005. Recuerdo que había más comparsas, de hecho cuando ya cantaba en Cádiz y regresé me encontré en mi ciudad con un Carnaval más desangelado en cuanto a agrupaciones. Antes te encontrabas a aficionados y a agrupaciones, y eso hay que recuperarlo. Lo que más me llama la atención ahora es que hay agrupaciones que cantan el ratito de rigor y no se quedan se van, y eso se podría solucionar. Se podría fomentar con un punto de encuentro carnavalesco como había antes. Se veía más ambiente en la calle.
¿Crees que en Chiclana hay cantera suficiente para seguir con la fiesta?
–Pues yo por experiencia cuando he ido a cantar me he dado cuenta que ahora los jóvenes consumen más carnaval que antes. Si tú a un chiquillo le das la facilidad para salir en una agrupación, y un local para ensayar, seguro que se potencia más la cantera, en Chiclana y en cualquier otro pueblo. Yo creo que se podría facilitar en ese sentido para empujar a los jóvenes, porque al final las calles se llenan de las familias de los juveniles e infantiles.
¿Cómo describirías el Carnaval que recuerdas para alguien de fuera?
–Tal y como lo recuerdo de cuando yo era jovencito, diría que es un Carnaval bastante callejero, muy competitivo, con agrupaciones que han dejado el listón muy alto incluso en Cádiz, diría que es muy parecido al de Cádiz en cuanto a afición. Pero como ahora hay menos agrupaciones pues al final se convierte en el pez que se muerde la cola, pero ilusión siempre hay.