José Manuel González Aragón, El Niño, como se le conoce en su chiclana natal y en los círculos cofrades, ha estado vinculado a la Semana Mayor durante toda su vida. Su abuela fue la artífice de que José Manuel descubriera su verdadera pasión, además de los medios de comunicación, el sentimiento cofrade del que este año tendrá la oportunidad de mostrar ante el público en el Teatro Moderno el próximo 26 de marzo, último domingo de Cuaresma, con el Pregón de la Semana Santa de Chiclana.
¿Cómo recibiste la noticia de que este año ibas a pregonar la Semana Mayor?
–Con muchísimas ilusión. En octubre me llamó el presidente del Consejo de Hermandades de Chiclana para darme la noticia delante de todos los miembros; acepté del tirón, aunque esto supone un reto muy grande para mí. Fue un momento muy bonito. No me lo esperaba, lo deseaba, pero no pensé que sería tan pronto, puesto que los pregones los suelen hacer personas que llevan más tiempo en el mundo de las cofradías y yo aún soy bastante joven.
Imagino que con nervios porque la fecha está ya próxima, pero ¿no es tu primer pregón, no?
–Los nervios están presentes, y ahora más que nunca. La gente de las hermandes me paran por la calle para preguntarme cómo lo llevo, y lo que puedo decir es que ya está terminado, que solo me falta ensayarlo y rematarlo. Pero sí, no es mi primer pregón en el ámbito cofrade, ya he realizado otros como el Pregón de los Costaleros o el de la Exaltación de la Mantilla.
¿Cómo será tu pregón?
–Va a ser un pregón muy sentimental, como yo lo soy porque así lo entiendo. Voy a narrar la Semana Mayor como yo la vivo, desde mi niñez, va a tener mucho corazón, y espero que pellizco. Además, coincide con una fecha muy especial, porque justo un día antes del Pregón de Semana Santa del pasado año, mi abuela falleció, y ella fue la persona que me descubrió la fe y el valor de las cofradías. Yo iba con ella de la mano a misa, la acompañaba a ver el señor de Medinaceli, y allí comencé mis pinitos en el mundo de las cofradías.
¿Te has inspirado en otros pregoneros?
–Me he encomendado a la Virgen de La Soledad y a todas las que visto. Es cierto que he visto otros pregones de la Semana Santa para adaptarme a los tiempos y ver cómo lo enfocan, pero el pregón es puramente mío.
¿Qué te ha dado la hermandad de La Soledad?
–Todo. Llevo desde el año 2005, ahora formo parte de la Junta de Gobierno como mayordomo, y es una suerte tremenda. Antes también fui hermano de Medinaceli, por mi abuela.
¿Cómo vives la Cuaresma?
–Muy intensamente, de hecho me gusta incluso más que la Semana Santa. A mí el tema de montar el altar, los pasos, vestir a las vírgenes, me encanta. También disfruto mucho con la gastronomía de estos días, las torrijas que no falten. Y, por supuesto, preparando mi programa cofrade y los directos.
La Semana Santa de Chiclana ha evolucionado mucho en estos últimos años, ¿crees que hay que mejorar algo?
–La Semana Mayor ha evolucionado enormemente, sobre todo, de hace diez años para acá. Ahora, encontramos a jóvenes motivados con las cofradías, se implican y buscan dinero para sus hermandades. Está todo mucho más organizado, hay más variedad, y los cofrades están apostando por cuidar el patrimonio de sus hermandades, estrenar cualquier enser o el ajuar para la Virgen, y eso se nota. La Carrera Oficial se amplió el pasado año y cuenta con un recorrido más bonito. Lo único, sí me gustaría que se constituyeran más hermandades, darle la oportunidad a las nuevas, y seguir poniendo en valor nuestra Semana Mayor.
Por último, ¿cuál es tu momento favorito de la Semana Santa?
–No te puedo decir solo uno, pero me voy a limitar a dos, el primero es la salida de La Borriquita, porque es el comienzo de todo, se vive con nervios y con muchas ganas, y el segundo es la recogida de mi hermandad, La Soledad, el Viernes Santo, es la última cofradía que se recoge, y es el momento más especial.