Un juzgado de Estepona investiga la presunta venta de coches del depósito, después de detectar la falta de medio centenar de los 70 vehículos intervenidos judicialmente, lo que llevó a sospechar que se estaban doblando matrículas y volviendo a troquelar bastidores. El propietario de Rimasa 2003 desvinculó entonces a su empresa de estas prácticas y aseguró que su sociedad nunca ha vendido a particulares, sino que lo hizo a desguaces y siempre con coches para chatarra.
Así, Rico, que salió en libertad y sin cargos, reiteró estas afirmaciones ante la policía y aportó la documentación que se le requirió, referida a los 35.000 vehículos que en los últimos cinco años se han vendido a diferentes desguaces siguiendo todos los trámites fijados por la ley, por lo que subrayó que si alguno de estos coches está en circulación no es achacable a su empresa.
Eso sí, el gerente de Rimasa 2003 reconoció que, debido a un error, un coche en depósito judicial fue echado para chatarra y vendido a un desguace de Sevilla hace dos años y medio; vehículo que, a la postre, fue puesto en circulación sin que tuviera nada que ver Rimasa, ya que ya no era responsabilidad suya.
Rico, que se muestró tranquilo, reiteró que aportó toda la documentación requerida, por lo que espera que el asunto quede aclarado.
Mientras, y según fuentes de la investigación, la operación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones.
