La vuelta del Chipiona CF a Primera Andaluza no está siendo, ni mucho menos, un camino de rosas. Está siendo una temporada de mucha lucha, esfuerzo y sacrificio en la que, quizás, no está encontrando la estabilidad para conseguir los mejores resultados sobre el campo. De hecho, ha permanecido en posiciones de descenso buena parte de la temporada. Actualmente, está a siete del Bazán, equipo que marca la permanencia, aun con ocho jornadas por disputarse. Una situación complicada, pero que no debe ser catalogada como de misión imposible. Y si en el peor de los escenarios, el desastre se confirma, al menos loa azules podrán marcharse con la cabeza bien alta, por haber dado en cada partido una lección de valentía, de persistencia, y de nunca perder la esperanza.

Así lo hicieron, precisamente, en el último partido disputado en casa, en el estadio Gutiérrez Amérigo, ante la RB Linense B, donde los chipioneros vencieron por 2-0 con goles de Luismi y Quini marcados antes del descasnso. Una renta suficiente para sellar los tres puntos y poder soñar con la permanencia. La próxima jornada, el equipo azul hará un desplazamiento al Campo de Gibraltar para medirse con el Algeciras CF B que, con tan solo nueve unidades en su casillero, es el colista de la competición.

Toda una oportunidad para poder enlazar una nueva victoria y seguir luchando por la salvación.