Quiero denunciar también las insinuaciones y burdas mentiras de los mandos del Partido Popular atribuyendo a la izquierda el origen de las protestas. Ojala fuera cierto que todos los jóvenes indignados que protestan contra esta situación de crisis y de recortes insostenibles fueran simpatizantes de izquierdas, porque de ser así no hubiera llegado al poder la derecha reaccionaria que hoy nos gobierna gracias a las mentiras de Mariano Rajoy y su cuadrilla durante la campaña electoral.
Mintieron cuando prometieron que todo iba a cambiar para bien y ahora dicen que no es posible en muchos meses. Mintieron cuando dicen que la política socialista es de izquierdas, como dice su secretario general Rubalcaba “socialdemocracia”…
Ya se están quitando la careta, ahí está la reforma laboral, que supone el despido libre, la vuelta atrás en educación: fuera la asignatura de educación para la ciudadanía, fuera los planes de oposiciones y la convocatoria de las mismas. Atrás en la ley del aborto, adelante la cadena perpetua, palos y más palos al que proteste en el 15M en Madrid, en la plaza de Cataluña (donde están sus socios de CiU), ahora en Valencia… Somos los ciudadanos los que con nuestros impuestos pagamos a los policías que pegan a nuestros hijos, y no somos enemigos de nadie. Además, que quede claro que el portavoz nacional del Sindicato Unificado de Policía (SUP), José María Benito, reconocía que las órdenes de como se deben reprimir las protestas vienen directamente de los políticos, y afirmó que "lo que no se puede hacer es matar las moscas a cañonazos".
Recordemos las palabras del señor Rajoy en el último congreso del Partido Popular, diciendo que los votos le han dado el poder y eso al parecer supone volver al nacional-catolicismo, a las prácticas más fascistas de la dictadura, a condenar a los jueces que investigan, a indultar a los mossos d´escuadra que torturan, a recortar servicios y salarios, mientras la clase política sigue con sus sueldazos y privilegios, y las entidades financieras negando créditos a los ciudadanos y haciéndose de oro con la crisis.
Ojo al dato ciudadanos, aún quedan unas elecciones, no nos dejemos engañar una vez más, y recuerden que a más votos más poder y más recortes en los derechos y valores democráticos, que tantas vidas y sacrificios costó conseguir al pueblo.
Que no nos tomen por tontos. Ya se acabó el Carnaval, fuera máscaras: menos caretas de ángeles de la guarda que los demonios están debajo.