La incorporación de los dos concejales de Unión Liberal por Tarifa, Carlos Núñez y María González, al equipo de gobierno local ha dado un vuelco al reparto de poder en el Ayuntamiento de Tarifa. A los nueve concejales que ostentaba la coalición formada por el Partido Popular (siete ediles) y Partido Andalucista (dos) se les unen otros dos para alcanzar los once concejales, mientra que la oposición queda reducida a los cinco del PSOE y un único representante de Izquierda Unida.
Carlos Núñez obtiene una tenencia de Alcaldía y además estará al frente de una nueva delegación, la de Promoción del Municipio y de Relaciones Institucionales. Tendrá dedicación exclusiva y, además, formará parte de la Junta de Gobierno. Por su parte, María González Gallardo, con dedicación parcial, obtiene la concejalía de Comunicación y Redes Sociales.
La incorporación de los dos ediles de ULT era una posibilidad que se venía barajando desde el pasado verano, si bien no se concretó hasta la Junta de Portavoces Extraordinaria celebrada el martes. El propio Núñez admitía en octubre de 2012 que al menos durante seis meses, el Partido Popular había estado “picando en su puerta” para poder sumarse al gobierno de Tarifa. Entonces, el propio secretario local del PP, Juan José Medina, señaló que el “pacto se encontraba prácticamente realizado”. Sin embargo, el asunto se enfrió durante algún tiempo.
La sintonía de Núñez con el PP es más que evidente, ya que fue militante de los populares e incluso fue el diputado más joven del PP en el Congreso en la última legislatura. A pesar de las diferencias que parecían existir entre ULT y el PP durante la campaña en 2011, el acuerdo se ha producido, si bien, a pocos días de llevarse a cabo el anuncio del pacto, el propio Núñez advertía que su intención era la de tener un papel importante en el equipo de gobierno: “No nos vamos a prestar a experimentos. Si nos subimos al gobierno será para cambiar las cosas. No pretendemos ser comparsa de nadie. Si nos es así, no tendremos reparo en entregar las llaves”.
El alcalde de Tarifa, Juan Andrés Gil, salió en defensa de los ediles de ULT durante el pleno en el que se anunció su incorporación ante las críticas de la oposición: “No hay que mirar al pasado; lo que se dijo en campaña forma parte de la campaña. Si ULT quiere sumar no es ningún atentado a la democracia, sino una opción que mira al futuro. Critiquen, pero no critiquen a la democracia”, dijo el primer edil.
El psoe, el más crítico
El desembarco de ULT en el gobierno local ha desatado una oleada de críticas desde la oposición. Desde la agrupación local del PSOE, Francisco Ruiz mostró su rechazo a la creación de dos nuevas delegaciones que considera que innecesarias y creadas sólo para contentar al nuevo socio de gobierno: “En la situación de crisis es lamentable que el equipo de gobierno local no emplee sus recursos en mantener los servicios públicos a los ciudadanos, sino que se dedique a crear nuevas delegaciones de protocolo institucional a la medida de los ediles de ULT, que en nada van a contribuir a sacarnos de la crisis. En tal sentido, el PSOE considera que el tiempo y dinero que se ha empleado en comprar voluntades, hubiera sido mejor invertirlo en arreglar las calles, mejorar el alumbrado público, incentivar la implantación de empresas en el municipio, apoyar a las pymes, poner en marcha de una vez por todas la electrificación de los núcleos rurales y en generar empleo en vez de en destruirlo, entre otras prioridades”.
La portavoz de los socialistas tarifeños, Carmen Miriam Iglesias, se pregunta qué ocurrió “con las denuncias interpuestas contra Núñez por una obra ilegal y por la que se pedían 90.000 euros o la ocupación ilegal de un vivienda destinada a maestros de Facinas por María González, asuntos por los que desde el equipo de gobierno se solicitó la incompatibilidad de los dos ediles para desempeñar cargos públicos”.
“No nos ha sorprendido, pero el paso al gobierno de los concejal de ULT es una bofetada sin manos a la democracia”, apuntó la edil que preguntó “cuánto va a costar y de donde van a sacar los dineros para llevarlo a cabo”. A Núñez le preguntó “por su postura ahora en temas como Valdevaqueros, el cobro de parkings ilegales en las playas, los despidos de los trabajadores municipales o las denuncias interpuesta ante el Consejo Audiovisual de Andalucía”, asuntos que meses atrás fueron utilizados por ULT para atacar duramente al gobierno local y, en especial, al alcalde.
El vicesecretario general del PSOE de Cádiz, Juan Carlos Ruiz Boix, habló incluso de “fraude electoral”. En los mismos términos se ha pronunciado la agrupación local socialista que ha considerado este movimiento de ULT “un engaño a sus votantes demostrando que este partido no ha sido más que una escisión de la más rancia derecha. Es una bofetada sin mano a la democracia y a la dignidad política", corroborando lo apuntado por la portavoz socialista durante el pleno del martes.
Tanto para Ruiz Boix, como para el secretario local socialista, Francisco Ruiz, lo más reprochable de toda la operación es “la forzada inclusión de los dos ediles de ULT que asumen delegaciones nuevas, inventadas, con mucha parafernalia y poco contenido, todo ello para justificar las liberaciones de los dos concejales. Para las paupérrimas arcas municipales y con la crisis que azota duramente a toda la ciudadanía además de una operación poco decorosa, supone un gasto del todo innecesario e injustificado”, asegura al mismo tiempo que subraya que “contradice totalmente la idea de Cospedal el hecho de que en el ayuntamiento de Tarifa de 17 miembros de la Corporación, un total de 11 ediles estén liberados”, señaló.
IU lamenta el gasto
Desde IU, Ezequiel Andréu se sumó durante la sesión plenaria a las críticas: “Quiero darles las gracias a los ediles del ULT porque con este pacto hacéis patente que no todos los políticos somos iguales. Y lo que lamento es que este nuevo movimiento siente una vez más cátedra en lo que tristemente viene siendo habitual en algunas formaciones políticas de la ciudad: El cambiar de partido o crear un partido con fines e intereses. No les deseo suerte y este pacto no es sino un despilfarro, un sin sentido y un fraude electoral por el que exijo la dimisión de los ediles de Unión Liberal por Tarifa. El nuevo gobierno con 11 liberaros se convierte en el de mayor coste económico de toda la historia de Tarifa”, en referencia al incremento hasta los once concejales. También preguntó a los ediles del PA “qué pintan ustedes en esta historia, asistiendo a esta pantomima”.
Núñez...¿candidato?
La decisión de Carlos Núñez, uno de los fundadores de ULT después de su marcha del Partido Popular, de aceptar un pacto de gobierno con el PP, ha levantado las sospechas, en especial desde el PSOE, de su posible regreso a las filas de los populares. La abstención de los andalucistas en este asunto, que hace patente el interés mostrado en exclusiva por el PP para incorporar los dos ediles de ULT, añade más sospechas a lo apuntado por el vicesecretario general del PSOE gaditano, Juan Carlos Ruiz Boix, esta semana.
Para Ruiz Boix, lo sucedido en el Ayuntamiento de Tarifa no es más que “un canje de estampitas”.
Este cambio supone un primer paso en lo que considera “una operación de mayor calado en el Partido Popular de Tarifa orquestada desde el PP provincial para sustituir a Juan Andrés Gil y situar como candidato a la Alcaldía en 2015 a Carlos Núñez”, sugirió.
El vicesecretario provincial de los socialistas recordó el pasado de Carlos Núñez como diputado de los populares en el Congreso en la última legislatura y destacó que “tuvo un encontronazo con Javier Arenas que lo condujo adonde está ahora”. Para Ruiz Boix, ese “encontronazo” le resulta ahora beneficioso para su carrera: “Como ahora en el PP quienes mantienen diferencias con Arenas tienen más posibilidades de crecer, más pronto que tarde, Núñez abandonará la formación liberal y los dos concejales se sumarán al PP”.
Ruiz Boix recordó también la postura de Núñez durante la campaña, cuando dejó claro que no tenía intención alguna de pactar ni con el Partido Popular ni con Juan Andrés Gil, una postura sobre la que ha dado un giro radical con esta incorporación al equipo de gobierno.