El Valencia hurgó en la herida zaragocista en su campo, donde no gana desde el 10 de noviembre del año pasado, al arrancar un punto después de igualar dos goles de desventaja.
El Real Zaragoza no supo conservar dicha ventaja para haber sumado el triunfo sigue complicándose la vida, mientras que el Valencia todavía pudo haber hecho más sangre si hubiera aprovechado la superioridad numérica de que dispuso en los últimos trece minutos por la expulsión del meta local Leo Franco.
El conjunto maño, acostumbrado a recibir un gol en la primera ocasión en la que su rival llegaba a su portería, comenzó el partido de manera contraria, adelantándose en el marcador por medio de un penalti transformado por Antonio Galdeano "Apoño" a en el minuto 5.
El Zaragoza, tras el tanto, dejó de presionar la salida del balón de su oponente lo que permitió a este dominar el juego. Fruto de ello fue una clara oportunidad de "Jonas" Gonçalves que salvó Leo Franco con una gran intervención en el minuto 16.
El susto hizo que los locales retomaran una mayor presión que igualó el control del juego y que llegaran con peligro a los dominios de Diego Alves, que en el minuto 22 realizó una gran intervención a disparo de Rubén Rochina.
Diez minutos después el equipo de Manolo Jiménez aprovechó la estrategia para marcar en una falta por medio de su máximo goleador, Helder Postiga, y poner el un tranquilizador 2-0.
Sin embargo, la alegría duró poco en las filas mañas dado que en el 36 el conjunto "che" acortaba distancias en una jugada bien trenzada desde la banda izquierda que finalizó Jonas.
El Real Zaragoza salió bien plantado tras el descanso pero fueron los visitantes los que aprovechando una de sus especialidades, el juego a balón parado, e igualaron la contienda, de nuevo por medio de Jonas en el minuto 70.
Con el conjunto local tocado por este segundo tanto llegó la expulsión del meta Leo Franco (min.77) por tocar el balón con la mano fuera del área que le daba la oportunidad a los levantinos de darle la vuelta al marcador.
El Valencia tuvo en sus manos haberlo logrado pero se encontró con dos grandes paradas de Pablo Alcolea, el portero suplente zaragocista, jugador del Zaragoza B, que se encontraba en el banquillo por la lesión del titular Roberto.