El defensa del Real Madrid Sergio Ramos ha asegurado que tras eliminar al Manchester United en octavos de final de la Liga de Campeones le hubiesen gustado "otras palabras" del técnico José Mourinho, "de reconocimiento" y no de crítica, porque se habían dejado "la piel" en el campo.
"Te puedo hablar por mí. Obviamente, después de eliminar a un grandísimo equipo como el Manchester en Old Trafford, me hubiesen gustado otras palabras de reconocimiento a tu equipo porque habíamos echado a un histórico, estábamos pasando a cuartos. Felicité a todos mis compañeros porque nos habíamos dejado la piel", declaró en una entrevista a 'El partido de las 12' de la cadena Cope.
El central sevillano reconoce que ha tenido discusiones con el preparador portugués, igual que con otros técnicos a lo largo de su carrera, pero que les une una relación "súper profesional y buena". "Debatimos. Me gusta decir las cosas a la cara y lo hice con Mou, al igual que lo hice con Luis Aragonés en su día", aseguró, antes de "pasar palabra" cuando le cuestionaron sobre si se sintió perseguido por él y sobre si seguirá en el Real Madrid. "A día de hoy, tiene contrato, y eso es una decisión personal", afirmó.
"En general creo yo que mis diferencias, no sólo con Mourinho, o con Luis Aragonés, en su día, siempre he dicho que me han servido para aprender. Llevando razón ellos, llevándola yo, pero respetándonos al máximo. Con Vicente que jamás he tenido ni una discusión", añadió, pero niega que sus compañeros le utilicen como interlocutor para trasladar sus quejas al míster. "No soy Robin Hood, ni el Defensor del Pueblo", indicó.
Ramos no quiso valorar la polémica desatada este martes por Mourinho, cuando aseguró que había habido "irregularidades" cometidas por la FIFA en la votación a mejor entrenador de 2012 que coronó al seleccionador español Vicente del Bosque. "Ya se verá si es demostrable o no. No sé si Vicente está enfadado. Los tres nominados son tres grandes entrenadores", dijo.
"ME LLEVARÍA A BUSQUETS AL REAL MADRID".
El segundo capitán madridista asegura que se lleva bien con todos los internacionales españoles del FC Barcelona. "Le sorprendería a mucha gente lo bien que me llevo con Piqué", afirmó, aunque reconoció que con el que mejor se llevaba era con Sergio Busquets. "Con 'Busi'. También con Andrés -Iniesta-, con Víctor -Valdés-... Es que me llevo bien con todos ellos. Quizás la gente sorprenda si digo Valdés, pero es que coincidimos en la Eurocopa en muchas cosas similares en la vida", contó.
Ramos, que dijo que "los niños a nivel defensivo van a querer ser como Puyol", no tuvo problemas en señalar a qué jugador azulgrana se llevaría al Real Madrid. "Me llevaría a unos cuantos, pero por necesidad, a Busquets, que aparte de ser un grandísimo futbolista como amigo y como persona es un once. Xabi acumula muchísimos partidos y necesita un jugador con las características de constructor y recuperador. 'Busi' reúne todos los requisitos. El iluminado es Andrés. Pero sería como ver a Messi de blanco: es algo imposible", confesó.
Además, tampoco tuvo reparos en decir quién es para él el mejor futbolista del mundo "Cristiano lo está demostrando. El otro también es un gran futbolista", aseguró, antes de relatar su relación con el portugués. "Nos llevamos por carácter, porque vamos de frente. Tanto con Pepe como con Coentrao me he llevado fenomenal. Nunca hubo, como se dijo, grupos de portugueses y de españoles", expresó.
Sobre esta edición de la Liga de Campeones, el de Camas afirmó que una final con el FC Barcelona sería un sueño, pero que hay que ir con calma. "Todo el mundo sueña con un 'clásico' en una final. Pero hablar de la final es faltar al respeto al Galatasaray", afirmó.
"TENGO LA SUERTE DE ALCANZAR 100 PARTIDOS CON LA SELECCIÓN CON 26 AÑOS".
Ramos se mostró muy orgulloso de poder cumplir 100 internacionalidades con España en caso de jugar ante Finlandia. "Se me viene la mente lo rápido que pasa todo, pero es un orgullo. El otro día, sin ir más lejos, los cumplía un grandísimo jugador como es Carles Puyol, prácticamente con 34 años, y tengo la suerte de alcanzarlos con 26, y en una etapa muy buena de mi vida como profesional. Estoy en el meridiano de mi carrera para seguir sumando", afirmó.
Además, reconoce el privilegio de lo que ha vivido con la selección. "Hemos pasado momentos difíciles... Se dice pronto, pero Eurocopa-Mundial-Europa te llena de orgullo. Pero no debes quedarte estancado pensando en lo que has conseguido. Ojalá se puedan conseguir muchos más. Tenemos una quinta espectacular para seguir logrando récords", indicó.
"Tengo mucho que agradecer que Luis Aragonés apostara por mí, habiendo un titular indiscutible como Míchel Salgado. Poner a un chaval de 19 años en una fase de clasificación para el Mundial no lo hacen todos los entrenadores", añadió.
El internacional español no olvida que ganar la Liga de Campeones es una de las cosas que sueña todavía con hacer, y que guarda un espacio en el gemelo para hacerse un tatuaje de la 'Décima'. "Es una espinita la que tengo clavada con la Champions, porque hace muchos años que en mi club no la hemos conseguido, es de los pocos títulos que me quedan por conseguir. Aunque, levantar una Copa del Mundo, para mí no haya nada igual. A mí padre le he visto llorar dos veces, y una es cuando me subí a la grada levanté la Copa del Mundo", señaló.
"SI ME GARANTIZAS QUE GANO LA 'CHAMPIONS', LA TIRO A CIBELES".
Ramos, que aseguró que le gusta "asumir responsabilidad" y que si llegasen a la final de la Liga de Campeones y le tocara tirar el penalti definitivo lo tiraría, hizo gala de su sentido del humor cuando le recordaron su caída de la Copa del Rey en 2011. "Si me garantizas que gano la 'Champions', la tiro nada más llegar a Cibeles", dijo entre risas.
Habló además de su penalti 'a lo Panenka' ante Portugal en la Eurocopa. "Es un momento que ha marcado mi vida, y después del penalti del Bayern era una espinita que tenía allí. Mi madre y hermana sufrieron porque no están preparadas con el mundo éste que vivimos. Así que ese penalti se lo dediqué a ellas. Mi madre, según me cuentan, se dio la vuelta para no verlo y mi padre se emocionó muchísimo", aseguró.
El zaguero madridista también confesó que quizás se había excedido en sus críticas al colectivo arbitral cuando aseguró que era "muy fácil" sancionarle. "Sigues con la adrenalina del partido. A veces uno dice cosas de las que después se arrepiente. Por acciones mías se me puso un cartel, que en ciertos momentos me lo había ganado, que jugaba al límite, que era agresivo, y eso los árbitros lo debían de tener en cuenta. Soy una persona muy honesta y muy clara. Me equivoco como el que más y digo lo que pienso para lo bueno y para lo malo", aseveró.
Por último, no quiso valorar la polémica desatada el martes con su compañero Karim Benzema, que aseguró que nunca le forzarán a cantar 'La Marsellesa' en los partidos con la selección francesa. "Con Benzema no he hablado de esto, pero no creo que haya que apartarlo de la selección por eso. Si toman la decisión de echarle de la selección, le van a echar de menos", concluyó.