El pívot español Pau Gasol volvió a ser por segundo partido y noche consecutiva la clave en el juego de equipo que permitió a los Spurs de San Antonio vencer a domicilio por 100-106 a los Rockets de Houston.
La aportación de Gasol de 15 puntos, siete rebotes y seis asistencias, fue clave en los momentos decisivos, cuando los Rockets, con el escolta-alero James Harden y el escolta Eric Gordon rompieron la defensa de los Spurs a base de triples y volvieron a imponer por dos veces desventajas de 15 tantos.
Harden logró un triple-doble 25 puntos, 13 asistencias y 11 rebotes, el segundo consecutivo con la misma aportación ante los Spurs, que lo une al legendario Elvin Hayes como los dos únicos jugadores que lo han conseguido en la historia del equipo de Houston.
Los intentos de remontadas de los Rockets en la segunda parte se dieron cuando Gasol estaba sentado en el banquillo y el entrenador de los Spurs, Gregg Popovich, para romperlas tuvo que llamarlo de nuevo a la pista, donde estuvo 33 minutos.
El mayor de los hermanos Gasol anotó 5 de 10 tiros de campo, falló un intento de triple, y acertó 5 de 8 desde la línea de personal.
Gasol estuvo siempre dominante en el juego defensivo y lo demostró al capturar seis rebotes, perdió sólo un balón, puso dos tapones y lideró al equipo en el reparto de asistencias con seis.
"Creo que voy a más en cada partido, el equipo hizo algunas variaciones y eso me ha beneficiado para que tenga más integración en el juego", declaró a EFE Gasol. "Las dos últimas victorias han sido muy importantes para el equipo".
Junto a Gasol, el alero Kawhi Leonard cumplió como líder encestador del equipo al conseguir 20 puntos que lo dejaron al frente de una lista de cinco jugadores, incluidos cuatro titulares que tuvieron números de dos dígitos.
El ala-pívot LaMarcus Aldridge logró un doble-doble de 16 puntos, 10 rebotes y tres tapones, mientras que el base francés Tony Parker también tuvo la misma anotación y dio tres asistencias.
El veterano escolta argentino Manu Ginóbili surgió como el sexto jugador de los Spurs al conseguir 12 puntos, que también ayudaron a la victorias del equipo de San Antonio, que se vengó de la derrota que sufrieron en su campo del AT&T Center, el pasado lunes y que fue la tercera consecutiva.
Ginóbili jugó 16 minutos en los que anotó 5 de 7 tiros de campo, incluidos los dos triples que hizo, capturó dos rebotes y dio tres asistencias.
Mientras que los Spurs mantienen el invicto en partidos disputados fuera de su campo con marca de 5-0 y promedio de 12,8 puntos de ventaja en cada victoria.
Los Rockets volvieron a depender de la opción del triunfo de la inspiración encestadora de Harden, que anotó 7 de 18 tiros de campo, pero sólo dos de nueve desde fuera de perímetro, y además volvió a tener un pobre control del balón que lo perdió siete veces, de las 14 que tuvo todo el equipo.
Gordon jugó su mejor partido ofensivo con los Rockets al aportar 27 puntos, incluidos 7 de 12 triples, y lideró el ataque del equipo de Houston, que también tuvo el apoyo del alero de origen dominicano Trevor Ariza que consiguió 15 puntos y cuatro fueron canastas conseguidas desde fuera del perímetro de 11 intentos.
El pívot suizo Clint Capela tuvo presencia en el juego interior y acabó el partido con doble-doble de 12 puntos, 10 rebotes y dos asistencias.
Gordon a falta de dos minutos anotó un triple que permitió a los Rockets ponerse a sólo cuatro puntos por debajo en el marcador (98-102), pero los Spurs respondieron con tiros de personal de Parker y Aldridge, que aseguraron la victoria, la tercera de los Spurs en las últimas cuatro visitas al Toyota Center de Houston después de haber ganado siete de los ocho encuentros anteriores disputados.
Los Spurs controlaron el partido desde el inicio, con una buena defensa que no permitió a los Rockets hacer su mejor juego ofensivo para concluir la primera parte con sólo 40 puntos, la marca más baja en lo que va de temporada.
Pero los triples fueron el arma con la que los Rockets superaron la defensa de los Spurs dentro de la zona, pues aunque dieron emoción al partido, al final no pudieron evitar la derrota.