El belga Philippe Gilbert ganó el pulso a los hermanos Schleck para rematar la triple corona de las Árdenas con su victoria en la Lieja-Bastoña-Lieja.
El belga Philippe Gilbert ganó el pulso a los hermanos Schleck para rematar la triple corona de las Árdenas con su victoria en la Lieja-Bastoña-Lieja, la última y la más antigua de las grandes clásicas de primavera, sobre un recorrido de 257,5 kilómetros salpicado con diez ascensos.
Gilbert invirtió un tiempo de 6h13:18 y refrendó su mágico momento de forma con la victoria cerca de su casa, mientras que Samuel Sánchez, décimo, fue el mejor español.
Se trata del cuarto triunfo consecutivo de Gilbert en las clásicas. Empezó con la Flecha Brabanzona y encadenó luego la Amstel Gold Race, la Flecha Valona y Lieja. Es también la octava clásica que gana el corredor belga, tantas como el francés Bernard Hinault en toda su carrera, y seis de ellas en los últimos 18 meses.
Los intentos de fuga comenzaron desde la misma salida. Transcurridos diez kilómetros marchaba por delante un grupo de ocho corredores, todos de equipos diferentes: David de Lay (Ag2r), Fredrik Kessiakoff (Astana), Eduard Vorganov (Katusha), Thomas De Gendt (Vacansoleil), Tony Gallopin (Cofidis), Mickael Delage (FDJ) y Yannick Talabardon (Saur-Sojasun).
No estaba representado el Omega Pharma Lotto de Philippe Gilbert, el gran favorito y con residencia en Verviers, a solo 30 km. de Lieja.
Gilbert aspiraba a la triple corona de las Árdenas, un logro que nadie había conseguido desde 2004, cuando el italiano Davide Rebellin (luego suspendido por dopaje) ganó la Amstel, la Flecha y Lieja. De ahí que el equipo Omega asumiera la responsabilidad de que la ventaja de los escapados no superara los cuatro minutos.
A 80 km. de meta se constituyó arriba un grupo intermedio con supervivientes del primero y gente que saltó del paquete principal: Enrico Gasparotto (Astana), Juan Manuel Gárate (Rabobank), Greg Van Avermaet (BMC), Jerome Pineau (Quick Step), Blel Kadri (Ag2r), Dario Cataldo (Quick Step), Damiano Caruso (Liquigas), Laurens Ten Dam (Rabobank), Yannick Talabardon (Saur) y Mickael Delage (FDJ).
El equipo de Gilbert y el Leopard de los hermanos Schleck se repartían el trabajo al frente del pelotón. El Astana de Alexander Vinokourov, ganador en 2010, colocó a tres corredores en vanguardia del paquete pero, dado que Gasparotto estaba en la fuga, sin tirar.
A 21 km. de la llegada, aprovechando un ascenso, atacaron los hermanos Schleck y se llevaron consigo a Gilbert y a Greg Van Avermaet (BMC). Segundos después, una avería mecánica obligó a Vinokourov a cambiar de montura y perdió todas sus opciones de repetir triunfo. En tierra de nadie marchaban Igor Antón (Esuakaltel) y el ruso Alexander Kolobnev (Katusha).
Los hermanos luxemburgueses se relevaron con Gilbert en el cuarteto perseguidor, dejaron atrás a Avermaet y la carrera quedó abocada a un pulso entre el nuevo Superman belga y los Schleck.
A 6 km. del final Gilbert cambió en un intento de romper la combinación fraternal. Andy quedó ligeramente descolgado pero regresó en la bajada. El grupo perseguidor estaba a 41 segundos bajo la pancarta de último kilómetro y la victoria era ya cosa de tres.
Frank, a cola del trío, tomó la rueda de Gilbert pero el belga apretó a la salida de la última curva y venció con enorme autoridad a los dos hermanos.