Los tres magistrados que componen el tribunal anunciaron el pasado viernes que finalmente aceptaban la nueva prueba testifical, por lo que hoy escucharán -a partir de las 10.00 horas- al taxista y a su mujer, Elena M. N.
El tribunal, sin embargo, ha rechazado la declaración del dueño del Kebab en el que el taxista compró la cena después de llamar a su esposa, K. M. I, y del amigo de Delgado que le ayudaba esporádicamente en el bar, Juan Antonio Barranco, al entender que se tratan “de meros testigos de corroboración periférica del contenido de las declaraciones de los dos testigos admitidos”, al tiempo que recordó que Barranco ya había declarado en el juicio.
Además del taxista y de su mujer, esta semana tomarán protagonismo las pruebas periciales. Así, este lunes declararán los cuatro peritos de la Policía Científica que analizaron las huellas, la sangre y los restos en el lugar del crimen.Mañana comparecerán los dos peritos encargados de los datos sobre las llamadas recibidas y realizadas por los acusados el día de los hechos, así como los forenses Julio Güija y Jesús Parejo que expondrán el estado de salud mental tanto de Carcaño como de los padres de Marta del Castillo.
Pedirán que el ‘Cuco’ salga en septiembre
El juez de Menores ha pedido a las partes que se pronuncien sobre cómo le contará al Cuco en la pena que tiene que cumplir (dos años y once meses) el tiempo que ya ha pasado internado. Su defensa reclamará que se compute también el tiempo que estuvo en un piso tutelado (562 días). Si se acepta éste saldría en septiembre de 2012.
Situación admitida de forma excepcional
Los tres magistrados de la Sección Séptima de la Audiencia provincial que componen el tribunal que enjuicia la muerte y desaparición de Marta del Castillo, acordaron el pasado viernes tomar declaración este lunes al taxista, Francisco José A. B, y a su mujer Elena N. M, al entender que “es patente” la relevancia” de las pruebas, pues con ellas “se pretende acreditar la presencia de uno de los acusados en el domicilio de León XIII, en palabras utilizadas por el fiscal, ‘en el marco horario fijado por las acusaciones, compatible con la participación atribuida al procesado en los hechos”.
Aun así, en un auto dictado el viernes, los tres magistrados reconocieron que la práctica de las pruebas solicitadas “no tiene encaje legal expreso en la Ley de Enjuiciamiento Criminal” y que la situación creada “es de una enorme excepcionalidad” al tratarse de una “prueba cuya existencia se tiene conocimiento en plena celebración del juicio oral”, hasta el punto de que “en los 85 años de experiencia profesional que suman los integrantes de este tribunal es la primera vez que una situación así se les plantea”.
El tribunal da diez días a las defensas por si tienen alguna prueba con la que rebatir a estos dos nuevos testigos.
