El legendario músico vuelve a Sevilla para impartir clases muy particulares
Manuel Imán, legendario músico sevillano, líder y fuerza creativa de los míticos Imán Califato Independiente se encuentra, desde hace algún tiempo, de nuevo en nuestra ciudad, donde da continuidad a su carrera musical que compagina con su faceta docente.
El próximo miércoles, día 1 de febrero, presenta la segunda edición de Cool vocals school. Es uno de los pioneros en la fusión y la creación de nuevos lenguajes musicales en la historia de la música española. Se traslada en 1995 a vivir a Malibú, California, donde graba cuatro álbumes como solista y compositor y numerosas colaboraciones con músicos de la talla de Abraham Laboriel (Steve Wonder, KD Lang...) Scarlet Rivera (Bob Dylan, Duke Ellington Orchestra), Dan Moretti y productores e ingenieros como Roger Nichols (Steely Dan, John Denver) o Paul Dieter (Jackson Browne, David Crosby).
¿Cómo era el ambiente musical de Sevilla en la época del Califato Independiente?
–Curiosamente aunque Imán tuviera dos miembros nacidos en Sevilla, empezó a fraguarse en un encuentro que tuve con Kiko Guerrero en Florida, USA, y con Iñaki en Madrid, que es donde inicialmente se formó la banda. Después de unos meses nos vinimos a Jerez hasta instalarnos en El Puerto. No obstante frecuentábamos Sevilla. Eso sucedía en el 76. Era una época de gran efervescencia cultural y política, estábamos en los comienzos de la Transición y se respiraba un aire nuevo. Muchas cosas ocurriendo en un contexto histórico único.Háblenos de sus experiencias en USA–Me gusta California, no lo puedo negar. Allí he estado 15 años de mi vida y he conocido gente maravillosa, aparte de conocer y estar con grandes músicos y profesionales. Allí he grabado cuatro de mis cinco discos en solitario, allí están mis hijos y muchos amigos.
¿En qué consisten los cursos de canto Cool Vocals School?
–Es un seminario que presento este miércoles en la Caja Negra con clase incluida. A las 8 de la tarde y entrada gratuita. En él la gente se lo pasa en grande, hacemos ejercicios vocales, de respiración y cantamos.¿A quién van dirigidos?
¿Es necesario tener nociones de canto?
–Va dirigido a todo el mundo. Lo bueno es que se crea un ambiente relajado en el que la gente se siente bien. Muchos y muchas se sorprenden de que pueden expresarse cantando, cosa que no creían posible antes. No es necesario tener ninguna noción de canto, no sólo se aprende, es terapéutico. Aparte, también imparto algunas clases particulares.
¿Cómo ve el panorama musical de Sevilla en la actualidad?
–Hay bastantes grupos interesantes, muy buenos. Es una pena que no se haya construido con el tiempo una plataforma que crease una infraestructura que permitiese un buen desarrollo de tanto talento. No estoy hablando de ahora, ya sabemos de la crisis, me refiero a antes, cuando se podía. Estamos en una ciudad de contradicciones: el mismo año que le dan el premio como mejor sala de música en directo de España a Malandar la cierran. Yo los fines de semana escucho el pum pum de una discoteca cada vez que sopla el viento hasta las siete de la mañana. Y eso sin hablar de las campanas, tambores, cornetas, etcétera.¿Qué le parecen las nuevas tecnologías y redes sociales?
¿Las utiliza para la difusión de su música y proyectos?
–Me parece todo bien, depende cómo se utilicen. Personalmente llevo mucho tiempo utilizando Internet para mi trabajo. Actualmente estoy componiendo una banda sonora para un documental y todo lo hago desde casa, recibiendo y mandando archivos.
¿Que hará Manuel Imán en los próximos meses?
–Pues seguir con la música. Hay conciertos a la vista. Ya te cuento en la próxima entrevista