El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha asegurado que el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, no es el ministro de Interior "adecuado para pilotar" este nuevo tiempo político sin violencia de ETA y cree "preocupante" que Rajoy "le avale". Además, ha calificado de "chapucera" la operación contra los interlocutores del EPPK, que, en su opinión, supone "un paso atrás" respecto a los avances de la sociedad vasca y de la propia izquierda abertzale.
El máximo representante del Gobierno vasco ha afirmado que el proceso de paz "no está parado" porque se trabaja "mucho por debajo" y ha ofrecido que la Ertzaintza verifique el desarme, si no lo quiere hacer el Gobierno del PP.
En una entrevista concedida a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, Urkullu ha señalado que no ha tenido ocasión de trasladarle al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, lo que opina de la operación policial.
"En esta ocasión, ni le he llamado ni le escrito porque estoy a la espera de que él me responda y ponga fecha para volver a encontrarnos. Y en el momento en el que nos estemos, le haré una reflexión completa sobre lo estimo que es la situación sobre la paz y la convivencia", ha indicado. A su juicio, "la ocasión merece" una reunión con Rajoy "por muchos motivos", no sólo por el tema de la pacificación.
En cuanto a la operación contra interlocutores del EPPK, ha apuntado que quiere pensar que el operativo, en respuesta a un mandato judicial, "estuviera sólidamente fundamentado".
Iñigo Urkullu ha indicado que le preocupa el mandato judicial que responde a otros procesos judiciales que han existido anteriormente "y que han quedado en nada", como, según ha explicado, ocurrió con Herrira, del que procede el actual caso.
"Estamos ante una legislación excepcional que se sigue aplicando en un tiempo diferente, después de dos años y meses desde que ETA anunciara el cese definitivo de su acción armada. Estamos ante la construcción de un proceso complejo, donde puede haber altos y bajos, pero donde una instrucción judicial, con un complemento de una operación policial chapucera, supone un paso atrás", ha indicado.
Tras precisar que la operación ha tenido, "a todas luces, un objetivo mediático", ha insistido en que "hay avances en la actitud en los diversos poderes del Estado, y en los jueces". No obstante, ha precisado que no son todos los miembros de la Judicatura los que dan estos pasos.
En este sentido, ha precisado que ETA ha anunciado "el cese definitivo" y el Colectivo de Presos "ha ratificado la estrategia del conjunto de la izquierda abertzale". "Se vienen dando pasos y, sin embargo, se observa que no hay un paso generalizado en la Audiencia Nacional, que es lo que reclamamos, que haya una asunción del nuevo tiempo en el que estamos", ha insistido.
Iñigo Urkullu ha abogado por profundizar en la 'Vía Nanclares' y "pasarla al estadio de la 'Vía de Zaballa', con las oportunidades que ofrece el nuevo centro penitenciario".
MINISTRO DEL INTERIOR
Preguntado por si Jorge Fernández Díaz es el ministro de Interior "adecuado para pilotar" el nuevo tiempo que se vive, ha respondido que "no". A su juicio, éste siempre se manifiesta en todas sus comparecencias sobre esta cuestión tan "sensible", como es la convivencia de la sociedad vasca, "como si nada hubiera ocurrido y está volviendo pasos atrás", cuando la sociedad vasca "ya había dados pasos adelante", como también lo hace la izquierda abertzale, aunque "más lento" de lo que se desea.
"El ministro de Interior hace querer ver que nada ha sucedido y que nada ha cambiado, y precisamente, es desde el Ministerio desde donde no se ven pasos adelante, sino pasos hacia atrás", ha señalado.
En cuanto a Mariano Rajoy espera que, en la reunión que mantenga, "sea consciente del tiempo en el que estamos viviendo", pero "no hay movimiento" por su parte "y avala las manifestaciones" de Fernández Díaz, "que es lo preocupante".
PROCESO DE PAZ
El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha afirmado que el proceso de paz "no está parado" porque "se trabaja mucho por debajo" para que, "dentro de un tiempo", se puedan visualizar "más pasos". Además, ha considerado que debe haber un desarme que sea verificado, y ha asegurado que la Ertzaintza está dispuesta a esa verificación si el Gobierno del PP se niega a ello.
Además, considera que da la impresión de que el proceso "está parado, está estancado, pero pasan cosas, se trabaja mucho por debajo". "Y, a pesar de que nos gustaría ver otro ritmo u otra velocidad en determinados pasos, se trabaja para que esos pasos se den y se pueda visualizar dentro de un tiempo también algún otro paso más", ha destacado.
Pese a que se puede percibir que "incluso las cosas van para atrás", el lehendakari ha insistido en que "están trabajándose cosas para que en el futuro podamos percibir pasos positivos".
DESARME
El lehendakari cree que, cuando se han vivido casi dos años y medio "desde el anuncio de cese definitivo de la acción armada por parte de ETA para que llegue un compromiso del llamado 'colectivo de presos políticos vascos', ratificando la estrategia actual de la izquierda abertzale", hay pasos como el desarme "que tienen que tardar menos".
Por ello, ha indicado que habló un plazo de seis meses para que ETA se desarme. "Si fuera antes, mejor", ha indicado, para señalar que "un gesto de desarme debe ser verificado" y él no pone objeciones a que sea el Estado español el que lo haga.
"Si no es el Gobierno español, porque hace ojos ciegos a un gesto de desarme, la consejera de Seguridad ha dicho que la Ertzaintza estaría dispuesta. Si no tiene que ser el Gobierno vasco y tienen que ser otros agentes internacionales y sociales, a mí me da igual. Lo que es necesario es que haya un gesto de desarme y que sea verificado", ha señalado.
MANIFESTACIÓN
Iñigo Urkullu ha afirmado que no se plantea que la manifestación convocada por 'Tantaz Tanta' para denunciar la dispersión este sábado en Bilbao pueda ser prohibida, pese a que está "preocupado" por la petición de la Fiscalía porque así sea.
En esta línea, ha recordado que esta misma marcha se ha celebrado en años anteriores y en circunstancias diferentes a las que estamos viviendo en el año 2014", ha añadido.
En este sentido, ha apuntado que, "quienes han convocado la manifestación en circunstancias anteriores, han cumplido los requisitos para celebrar la manifestación y no ha sucedido nada, por regla general".
"Si se viene celebrando durante muchos años, está en el calendario anual de la estrategia de la izquierda abertzale y si esto lo hemos vivido en circunstancias anteriores. ¿Por qué ahora tenemos que estar sometidos a esta tensión?", ha preguntado.
En caso de que la manifestación se prohíba, ha reconocido que la Ertzaintza tendrá que intervenir y ha recordado que, como Policía integral, "actúa a mandato judicial". "Y si hay un mandato judicial, la Ertzaintza tendrá que actuar como hasta ahora ha venido actuando", ha indicado.
Además, se ha referido al hecho de que la portavoz parlamentaria de EH Bildu, Laura Mintegi, le llamara el día de la operación contra los interlocutores del EPPK para pedirle que la Ertzaintza no actuara, se ha mostrado "molesto" porque por este hecho porque "la única pretensión" de la representante de la coalición soberanista fue la de, "al minuto siguiente de llamar, hacérselo saber a los medios de comunicación".
"Si pensaba que el lehendakari iba a dar instrucciones a la Ertzaintza de cómo tendría que actuar en un operativo policial, está absolutamente equivocada. Otra cosa es que el lehendakari también esté preocupado porque la actuación de la Ertzaintza sea proporcional a las circunstancias que se da en cada caso", ha concluido.