La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha reivindicado este domingo que el PP "sabe hacer buena política económica" y ha fijado como reto la creación de tres millones de puestos de trabajo. Enfrente, ha situado a "los de podemos, los de pudimos pero no quisimos y los de a lo mejor se puede" para asegurar que ninguno de ellos "va a conseguir ese objetivo".

   En la misma línea, en su intervención en la clausura de la Convención Municipal del PPdeG, ha cargado contra "los que no vieron la crisis y ahora no ven la recuperación" y ha cuestionado también a "los nuevos, que no ha testado nadie". "Viendo lo que hacen sus amigos por el mundo, mejor que los experimentos se hagan fuera de casa", ha sentenciado.

   En presencia del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y la ministra de Fomento, Ana Pastor, entre otros cargos del PP, ha profundizado en que la política económica de su partido es "la antesala de la política social", pues trabaja "pensando en el bienestar" de las personas.

   Como ejemplo de ello, la 'número dos' del Gobierno de España ha puesto a Feijóo, que en su discurso había reivindicado la construcción de hospitales y centros de salud, por destinar "más del 40 por ciento" de los fondos de la Xunta a sanidad. En cambio, ha proseguido, "otros que pretenden dar lecciones de política social se quedan en el 30 por ciento".

   Tras blandir este caso para proclamar que "no todos los gobiernos son lo mismo", pues "ni todos hacen lo mismo ni obtienen los mismos resultados", ha recordado que cuando Mariano Rajoy llegó al Gobierno "se destruían 3.200 empleos al día y hoy se crean 1.400". Asimismo, ha subrayado que España en 2011 era "firme candidata al rescate y hoy lidera el crecimiento en Europa".

"EN RECUPERACIÓN"

   "España estaba en una profunda recesión y hoy está en una recuperación cada vez mejor", ha abundado Sáenz de Santamaría, convencida de que los españoles perciben esta afirmación a la vista de que "se consume más, se piden hipotecas, se compran coches..." y de que 1.400 personas abandonan diariamente las listas del paro, según sus datos.

   Igualmente, ha destacado que un millón de personas recibirán, al menos, uno de los cheques familiares anunciados tras el Consejo de Ministros del viernes, que suponen bonificaciones fiscales para familias monoparentales con hijos y parados y pensionistas con discapacitados a cargo. También ha señalado que son muchos los asalariados que ya notan la reforma fiscal en sus nóminas.

   "Esto no es publicidad ni eslóganes en las redes sociales", ha enfatizado, tras admitir que la legislatura ha sido "dura y difícil" y que se han pedido "muchos esfuerzos" a los ciudadanos. "Pero, ¿quién iba a decir que, tres años después de la profunda crisis, España iba a liderar el crecimiento y la creación de empleo en Europa?", ha subrayado, entre aplausos de los asistentes.

   Todo ello, ha recalcado la presidenta, debe ser puesto ahora "en valor" para impedir que "se ponga en riesgo". Y es que, como ha dicho, ha costado "esfuerzos inmensos" que han acometido "los españoles y el PP" para "evitar el rescate y reformar España de arriba a abajo" y sin poder contar con el apoyo de "los que predican desde las tertulias".

"HAY UNA OPCIÓN QUE NO VA A FALLAR"

   Al hilo de ello, ha opinado que, si el PP no estuviese gobernando en tantos municipios, diputaciones y comunidades, "la tarea habría quedado a medias". "Sin tantos 'feijóos', hoy España no estaría donde está", ha aseverado, respondiendo así al guiño del presidente gallego: "Soraya es una de las mejores políticas de España".

   Por tanto, Soraya Sáenz de Santamaría ha pedido ahora a los españoles "no tirar por la borda, de la mano de los predicadores", el trabajo hecho. "Aunque algunos se empeñan en decir que todo va mal, hay una opción que no va a fallar", ha comprometido.

   Así, ha arengado a sus compañeros de filas para "salir a la calle" a decir a los ciudadanos que el PP está "sacando al país de la crisis, creando empleo, recuperando el consumo y el bienestar de las familias y colocando a España en el lugar que merece en Europa".

   "Porque --ha finalizado-- una cosa es predicar y otra dar trigo; pero para dar trigo hay que sembrar. Nosotros llevamos tres años sembrando para poder recoger ahora los frutos". "No trabajamos para ver quién llega antes al sillón, sino para ver quién trabaja más por la recuperación", ha sentenciado.