El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha abogado por cambiar el objetivo de déficit impuesto para el próximo año, que el Gobierno central ha fijado en el 0,3 por ciento, y por que el voto que tienen las comunidades autónomas en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) tenga más peso, "valga mas".
De este modo se ha pronunciado el presidente regional durante la toma de posesión de su Consejo de Gobierno, un día después de que el Ejecutivo socialista se estrenase en este foro, y se "descubriese" que al haber incumplido el objetivo de déficit fijado para este año el esfuerzo de contención que tendrá que hacer la región será mayor.
Tras mostrarse "en contra del modelo de ajuste del Gobierno central", por la "deplorable injusticia" que ha provocado el ajuste, ha lamentado que el Ejecutivo de Mariano Rajoy "ahora plantee a Castilla-La Mancha ajustar el cinturón dos agujero más".
"No quiero decir que no vamos a cumplir, pero vamos a intentar cambiarlo", ha dicho el presidente regional respecto a esta cifra, al tiempo que ha criticado que en el CPFF las comunidades autónomas vayan de oyentes", en referencia al mayor peso que tiene el voto del Ministerio de Hacienda. "El voto de las autonomías tiene que valer más que para la queja", ha plateado García-Page.
"Nos negaremos a ese corsé injusto, porque además Castilla-La Mancha, a pesar de la propaganda oficial y después de tanto ajuste, ha incumplido notablemente el objetivo de déficit. Alguien ha debido mentir en campaña al decir que no iba a haber más recortes", ha criticado.
Es por ello que ha incidido en la necesidad de plantear una estrategia general, no sólo de las comunidades del PSOE, para que el ajuste no recaiga en lo que "más le afecta a la mayoría de la gente, que es la educación y la sanidad", donde, a su modo de ver, "más se ha cebado el recorte".
Y es que lejos de plantear un solo recorte más en los servicios públicos, García-Page ha dicho que el escenario de recuperación en Castilla-La Mancha será progresivo, incluso lo ha comparado con una huelga de hambre, diciendo que cuando uno la abandona no se da un "atracón", si no que empieza a comer "poco a poco".
No obstante, ha precisado que la educación y la sanidad, sectores que "más han sufrido" tras el paso del Gobierno del PP, quedan exentas de esa recuperación "lenta", todo ello "sin aumentar la presión fiscal".
