Manuel Cobo continuará siendo el vicealcalde de Madrid y portavoz del PP en el Ayuntamiento, según aseguró ayer el propio alcalde Alberto Ruiz-Gallardón, quien ha dejado claro que “en nada tienen que ver” las razones por las que el PP estudia sancionar a Cobo con la labor de éste en el Consistorio.

En una esperada comparecencia de prensa tras la reunión semanal de su Gobierno, Ruiz-Gallardón afirmó que la suspensión cautelar de militancia que decidió el Partido Popular para Cobo sólo influirá en que no podrá participar ni votar en los órganos internos del partido, como es el caso del Comité Ejecutivo Nacional, del que forma parte.

Al margen de esto, “el hecho de militar o no en un partido político es algo que no condiciona el ejercicio de las funciones públicas”, recordó el alcalde, que, además, dio ejemplos de personas que desempeñan cargos públicos en el PSOE y en el PP sin estar afiliadas a esos partidos.

Pero por si quedaba alguna duda acerca de que Cobo iba a continuar en su puesto, su jefe incidió también en que las declaraciones del vicealcalde sobre la presidenta Esperanza Aguirre que le han causado la suspensión de militancia “en nada tienen que ver con el ejercicio de sus funciones como portavoz del Partido Popular en el Ayuntamiento o como vicealcalde”.

Por lo demás, Gallardón siguió a pies juntillas la directriz que recibió el pasado martes en el Comité Ejecutivo Nacional del PP: de los asuntos internos del partido se habla en los órganos internos y no en los medios de comunicación.

El alcalde respondió con este argumento a al menos cinco preguntas de los periodistas, entre ellas a si no le parecía chocante que el PP suspenda a Cobo de militancia por expresar sus opiniones y no haga lo propio con el ex tesorero del Partido Popular, Luis Bárcenas, que está imputado por cohecho y prevaricación.

Quien también parece haberse atenido disciplinadamente a la consigna de no hablar de asuntos del partido en los medios ha sido la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, quien a pesar de caminar ayer sobre unos elevados tacones rehusó hacer declaraciones a la prensa, aunque dijera que sólo guarda silencio cuando viste zapato plano.

Su número dos, el vicepresidente madrileño, Ignacio González, si que ha opinado que “hubiera estado bien” que Cobo “se hubiese retractado o matizado o corregido” en “algunas de las cuestiones” que denunció acerca de la presidenta Aguirre y de su Gobierno.