El gasto en prestaciones por desempleo aumentó un 40,8 % en enero, respecto al mismo mes de 2020, hasta alcanzar los 2.629,5 millones de euros, de los que 694 millones se abonaron a trabajadores en expediente de regulación temporal de empleo (ERTE).

Según los datos proporcionados este martes por el Ministerio de Trabajo, la cobertura de esta prestación por desempleo alcanzaba al 64 % de los parados, es decir, que uno de cada tres no contaba en enero con ningún tipo de protección, una tasa que prácticamente se mantiene desde hace años.

El número de beneficiarios aumentó un 16,1 % hasta los 2,4 millones de personas, de las que la mayor parte, 1,2 millones, eran perceptores de una prestación contributiva (22,2 % más).

Les siguen los 995.562 que recibieron un subsidio por desempleo, los 138.214 de la renta activa de inserción, los 94.465 del subsidio de eventuales agrarios y los 3 del extinto programa de activación para el empleo.

El gasto medio mensual por beneficiario, sin incluir el subsidio agrario de Andalucía y Extremadura, en el mes de enero ha sido de 1.130,8 euros con un aumento sobre el mismo mes del año anterior de 196,9 euros (21,1 %).