No uno, sino dos escritos se han presentado esta mañana por Registro de Entrada en el Ayuntamiento de Estepona. Ambos de colectivos vecinales en contra de la gasolinera que se ubicaría junto al viejo Parque de Bomberos, y que la empresa Patrimonial Adonara podría comenzar a construir una vez que se ha anulado el convenio que fue suscrito en 2005 y que sustituía el uso industrial por residencial.
El primero de los escritos está firmado por David Domínguez, presidente de la Macrocomunidad de propietarios Las Brisas. En él expone "el rechazo a la construcción de una gasolinera y tren de lavado en la parcela colindante a la nuestra". Añade además que "los motivos de dicho rechazo son el peligro y las molestias por ruido, respectivamente, que acarrearán dicho establecimiento para los vecinos de nuestra urbanización".
Hay un segundo escrito, presentado por Juan José Gómez, presidente de la macrocomunidad Doña Erminda. En la misma línea, explica que tras la celebración de la Junta General Extraordinaria se ha aprobado por unanimidad manifestar su "oposición" al acuerdo plenario.
Así, "como perjudicados de la construcción nos vemos en la obligación de solicitar a los responsables del Ayuntamiento que informen de: tipo de establecimiento a aperturar, tipo de almacenamiento, en base a estos datos objetivos, distancias mínimas de seguridad en atención a las edificaciones existentes, y el destino al que se dedican estas edificaciones (a tener en cuenta residencia de ancianos e instalaciones deportivas públicas, parques infantiles...)". En segundo lugar exigen que se informe sobre "la existencia de informe de impacto medioambiental que cumpla las exigencias de la legislación legal vigente". Preguntan también sobre si "el Ayuntamiento cuenta, en caso de incendio u otra situación de peligro que requiera de evacuación, asistencia de bomberos y facultativos médicos en la referida área de servicios, con los medios necesarios, atendiendo a que no solo se trata de una zona residencial amplia, existen edificios de una altura considerable, con sótanos de garajes, casas adosadas, ocupadas por personas de edades muy diferentes, sino que además se encuentra situada junto a una residencia de ancianos con una movilidad reducidísima, centros de ocio para escolares, parques de recreo... circunstancias que sospechamos no se han tenido en cuenta a la hora de valorar por este equipo de Gobierno, y los técnicos municipales, el otorgamiento de licencia para esta estación de servicios".
Se critica en el escrito que "los únicos informes a tener en cuenta por el equipo de Gobierno han sido los económicos y se han obviado otras consideraciones".
Queda constancia, por tanto, de la oposición frontal por parte de las macrocomunidades de vecinos afectados por la decisión municipal que se ha aprobado en el pleno de enero.