El Ayuntamiento de Estepona ha acordado un nuevo expediente de prescripción de facturas, caducadas y que se encontraban 'guardadas en los cajones', por un importe total de 816.871,93 euros. Se trata de facturas emitidas en el periodo comprendido entre 1998 a 2008, algunas de ellas en pesetas (antes de la entrada en vigor del euro). Esta cuantía económica se suma al expediente ya aprobado en noviembre de 2013 para la prescripción de un total de 1,4 millones de euros, correspondientes a otras facturas emitidas dentro del periodo 1989-2003; elevando así a 2,2 millones de euros la cuantía de facturas que estaban caducadas dentro de la contabilidad municipal.
En ambos casos, se trata de facturas -generadas por anteriores responsables municipales- que no fueron abonadas y que han incurrido en la prescripción por no haberse reclamado su pago por parte de los acreedores, dentro del plazo de cuatro años legalmente establecido; de forma que ahora el Ayuntamiento, al haber transcurrido ese plazo legal, ya está imposibilitado para el abono de las mismas.
Dentro de la labor que el Ayuntamiento está llevando a cabo de poner orden en las cuentas municipales, se está realizando esta tarea de depurar y reflejar la realidad de la contabilidad municipal.
Sobre el asunto, el concejal del área Económica, Manuel Aguilar, ha explicado que “nunca se debería haber dado esta situación” y que “la acumulación de facturas sin pagar fue una práctica habitual por parte de los anteriores gestores”, lo que dio lugar a que, en junio de 2011, la deuda total del Ayuntamiento de Estepona ascendiera a más de 300 millones de euros. Esta cifra -ha recordado el edil- se ha reducido en casi un 20%, mediante el pago de 50 millones de euros de los débitos que no estaban prescritos. Con todo, ha lamentado el perjuicio económico que estos impagos sistemáticos causaron a proveedores y empresas, que no consiguieron cobrar los servicios y suministros que prestaron al Consistorio.
El edil ha indicado que el actual equipo de gobierno ha devuelto la seriedad y la normalidad institucional y que ha desterrado las prácticas “irresponsables de los anteriores gestores” que llevaron a Estepona a la ruina económica; de forma que el Ayuntamiento paga ahora los servicios que contrata y no genera deuda.
El responsable del área Económica ha resaltado que la política de austeridad emprendida ha dado lugar a que sus gastos ordinarios se hayan reducido un 20%, lo que supone un ahorro anual de más de 15 millones de euros. Por otro lado, ha dicho que este plan de austeridad y de control del gasto ha generado una bajada de la presión fiscal y una mejora de las instalaciones, infraestructuras y servicios en el municipio, “lo que contribuye a fomentar la actividad económica y, por tanto, el desarrollo de empleo”.
Aguilar también se ha referido a los planes para el pago de la deuda heredada con otras administraciones; entre ellos, los acuerdos de pago fraccionado de más de 40 millones de euros con Seguridad Social y de más de 13 millones de euros con la Agencia Tributaria, que han permitido que ambos organismos certifiquen que la administración local durante este mandato no ha generado más deuda y se encuentra al corriente en los pagos.
