El pasado 18 de septiembre, la Fiscalía General del Estado presentaba la Memoria correspondiente a 2011, y entre tantas cifras, destacaba que la provincia onubense se sitúa en segundo puesto en descenso de las diligencias judiciales por delitos incoadas. Unas semanas después, Viva Huelva ha analizado estos datos con el fiscal jefe onubense, Jesús Jiménez Soria, que también ha puesto sobre la mesa las carencias y necesidades más urgentes de la Fiscalía de Huelva.
Más allá de datos y cifras, el fiscal jefe resume que la delincuencia en Huelva está “estabilizada”, a pesar del leve descenso del pasado año, a lo que añade que “no es Huelva una provincia especialmente conflictiva y no se aprecia que haya cambiado el perfil delincuencial de la provincia”.
Sin embargo, todo ello “conforma una gran cantidad de trabajo, no sólo para la Fiscalía, sino también para los juzgados, que podrán verse colapsados, una y otros, si no cambian las infraestructuras y los propios procedimientos sobre los que se basa el actual entramado judicial”.
En este punto, Jiménez Soria se muestra especialmente crítico en cuanto al número de personal y las dotaciones en materia de infraestructura.
Sobre el personal, explica que la Fiscalía onubense cuenta con 28 fiscales, insuficientes para dedicarse lleno a la especialidad atribuida. Así, explica que “los fiscales están distribuidos por especialidades, una de las primeras en crearse fue la de Violencia de Género, y el objetivo es que cada servicio se dedique lo más posible a esa especialidad, pero no hay suficientes fiscales para trabajar en exclusividad”. Como ejemplo, explica que en Vigilancia Penitenciaria hay dos fiscales para “un volumen de trabajo muy grande”.
La otra gran carencia está en la plantilla de funcionarios. Si en el caso de las plazas de funcionarios, es el Gobierno central el competente para crear más, el personal funcionario depende de la Junta de Andalucía. En el caso de Huelva, la Fiscalía cuenta con 19 más tres de refuerzo, de modo que “no hay, ni siquiera, un funcionario por fiscal ni por especialidad, cuando lo ideal sería un fiscal y un funcionario por cada especialidad”.
Por ello no duda en alabar “el tiempo y dedicación de los funcionarios”. De hecho, reconoce que solo gracias al “esfuerzo y dedicación que aportan los fiscales y los funcionarios, y los jueces, secretarios y funcionarios en sus respectivos órganos judiciales, el sistema se sigue manteniendo con unos niveles mínimamente aceptables, pero sin poder ofrecer la calidad, rapidez y eficacia deseada”.
Por ello, el fiscal jefe de Huelva insiste en que “es muy importante que haya un número de funcionarios adecuados y suficientemente preparados”, este último aspecto en concreto para los sustitutos interinos, ya que “hasta el mes de una baja por enfermedad no se cubre la plaza, cuando llega el sustituto, otro funcionario tiene que enseñarle, pierden tiempo los dos, y cuando ya ha aprendido, tiene que irse”.
Infraestructuras
En cuanto al tema de las dotaciones de infraestructuras, Jiménez Soria lamenta la “dispersión” de órganos judiciales y afirma que los espacios de Fiscalía como del Juzgado de Menores “se han quedado pequeños”, así como el de los archivos. Por ello, insiste en que la solución pasa por la Ciudad de la Justicia, algo que no olvida a pesar de las últimas declaraciones del consejero de Justicia, Emilio de Llera, que descartó la realización de este proyecto en la actualidad.
La delincuencia en Huelva
Volviendo a la Memoria de la Fiscalía de 2011, Jiménez Soria hace hincapié en que los delitos contra el patrimonio y el orden socioeconómico son los que representan el mayor porcentaje frente a los demás, concretamente el 66,84% del total.
También destaca los delitos de tráfico de droga, ya que, “sin que numéricamente supongan un gran porcentaje, se mantienen, aunque se ha de resaltar el considerable descenso de las cantidades de droga incautadas, especialmente hachís”. En este aspecto, confía en que se deba a la efectividad de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
El fiscal jefe de Huelva también subraya la “lacra” que supone la violencia de género, que “no ha disminuido en modo alguno, manteniéndose en cifras importantes que han justificado hasta la creación de un Juzgado de Violencia sobre la Mujer”. No obstante, reseña que en el año 2011 no se ha producido una muerte achacable a la violencia de género.
Por último, Jiménez Soria explica que la presencia de trabajadores extranjeros para la campaña de la fresa ha motivado “un mantenimiento en los delitos en los que ellos son las víctimas, en sus modalidades de tráfico ilegal de mano de obra o contra las condiciones laborales o de la Seguridad Social, por ejemplo”.
La necesidad de un centro de menores
"Huelva es la única provincia que no tiene centro de menores, no entiendo por qué, y con la ley en la mano, es necesario e importante que lo haya”, lamenta Jiménez Soria.
Bebés robados: “Si el delito ha prescrito, no se puede perseguir”
El reciente auto de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial ha supuesto un varapalo para los casos de presuntos bebés robados, ya que el juez estima que no pueden considerarse los hechos relatados como constitutivos de delito de detención ilegal, o en su caso, habrían prescritos ya que no los considera delitos permanentes.
El fiscal jefe de Huelva, Jesús Jiménez Soria, lleva personalmente estos casos, y explica que ahora “esta situación hace que nos replanteemos todo, pensar qué corresponde hacer”. Así, explica que está a la espera de ver qué dice la Fiscalía General del Estado sobre qué posición tomar, ya que “es necesario tener una opinión más allá de la Audiencia de Huelva”.
El principal problema, explica, es que este auto señala que, en caso de que hubiera delito de detención ilegal, tiene efectos permanentes pero no se ha cometido permanentemente, de modo que habría prescrito, y “si el delito ha prescrito, no se puede perseguir”. No obstante, recuerda que los afectados pueden recurrir.
