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Jaén

Las autovías y el ferrocarril otra vez al ‘ralentí’ en Jaén

Los socialistas denuncian que el Gobierno central olvida la autovía A-4, la A-32 y la conexión de Jaén con Granada por tren

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  • Cartel en la autovía a Granada -

El PSOE de Jaén consideró “inaceptable” que el Plan de Infraestructuras, Transporte y Vivienda (PITVI 2012-2024) del Ministerio de Fomento no contemple la conversión de la A-4 en autovía de segunda generación, ni la conexión ferroviaria entre Jaén y Granada. Asimismo, criticó que el plan no fije concreciones temporales ni compromisos presupuestarios con otros proyectos como la A-32 o la línea de altas prestaciones Jaén-Madrid.


En rueda de prensa, el coordinador del Grupo Parlamentario Socialista, Felipe López, dio a conocer las alegaciones que el PSOE ha realizado al citado plan, objetivos a los que, según subrayó, los socialistas “no van a renunciar”. En primer lugar, denunció la “ausencia” de dos proyectos importantes para Jaén, como son la conversión de la A-4 en autovía de segunda generación y la conexión ferroviaria con Granada, y solicitó al Gobierno que recapacite y que acceda a incluirlos. En el caso de la A-4 recordó que esta intervención estaba contemplada en el Plan Activa Jaén. En cuanto al ferrocarril, sobre todo a la conexión de Jaén con Granada, López, precisó que el PSOE “no está pidiendo que se haga mañana”, pero consideró inadmisible que ese proyecto “esté ausente con un horizonte temporal tan largo”. El senador socialista recordó que este proyecto sí figuraba en la anterior legislatura gracias a una PNL presentada por el Grupo Parlamentario del PSOE.

Un negocio
En líneas generales, el senador socialista afirmó que éste “no es un plan, sino más bien una declaración teórica de intenciones sin horizonte temporal ni compromiso presupuestario detallado”. Sobre la financiación privada a la que apunta el Ministerio de Fomento, López advirtió que “convertir un servicio público en un negocio privado tiene sus consecuencias”, como el empeoramiento de la calidad del servicio o el aumento del coste para el Estado y para el ciudadano. En este sentido, recordó lo ocurrido con las autopistas de peaje de Aznar, que ahora van a tener que ser rescatadas en lo que consideró un paradigma de la política de la derecha: “Si el negocio va bien, resulta lucrativo; y si va mal, se socializan las pérdidas. Ésa no es la vía”, concluyó.

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