Manuel Escudero Piedra es desde hace tres semanas el nuevo jefe del Parque de Bomberos de Jaén. Aunque nació en Cabra (Córdoba) en 1956, llegó a Jaén con seis años (su padre fue director del Banco de España) y, tras una etapa en la empresa privada (un centro consultor de ingeniería), desde hace 20 años es funcionario del Ayuntamiento, tras ganar por oposición la plaza de ingeniero de caminos. Escudero, que estaba hasta ahora en los Servicios Técnicos Municipales de Urbanismo, llega a un área totalmente desconocida para él con el ánimo de instalar la paz social en un parque que en los últimos años no ha estado exento de conflictividad laboral.
“Yo vengo de cero, pero con mucha ilusión; quiero ser lo más equitativo  con todo el personal pero espero la colaboración por parte de todos”, subraya Escudero . De momento, para hoy martes ha convocado una reunión, junto al concejal del área, Juan Carlos Ruiz, donde espera que se pueda abrir una mesa de diálogo con los sindicatos con una periodicidad permanente.  Y cree que podrá llegarse a un acuerdo para ampliar el periodo en el que pueden tomar las vacaciones y adelanta flexibilidad a la hora de los cambios de escuadra.
Escudero señala que, frente a lo que podía pensarse, se ha encontrado un ambiente “excepcional” entre la plantilla del parque, aunque eso sí admite que las dificultades pueden llegar “cuando empiece a pisar callos”.
De entrada, Manuel Escudero reconoce que existe un déficit de personal en el parque de bomberos, cifrada actualmente en 70 personas (incluyendo los ocho que están en comisión de servicio procedentes de otros parques), cuando el Reglamento del cuerpo la sitúa en 90 en función a la población que atiende en un total de 24 municipios. Las cinco escuadras del parque están atendidas por 12 efectivos (incluyendo los dos cabos y bombero-conductor), cuando la normativa exigiría seis más. Así las cosas, el Ayuntamiento ya ha anunciado para este mismo año la convocatoria de una oferta pública de 16 nuevas plazas de bomberos (no se prevé que se haga antes del verano) después de la negativa judicial a cubrir parte de esas vacantes con bomberos interinos. Sin  embargo, nada más aterrizar en su nuevo puesto Escudero ha emitido otro informe en el que asegura que hacen falta otras 16 plazas para poder cubrir todos los servicios.
Califica como “razonable” la situación de la flota de vehículos, aunque sí que demanda dos nuevas bombas urbanas liberas para poder acceder a las calles más estrechas de la ciudad, una de las principales dificultades con las que se encuentran los miembros  del parque de bomberos. También reconoce que no se está haciendo un buen uso de la tecnología en la organización interna del trabajo, pues aunque tienen instalado el programa informático no se está utilizando. Y eso les lleva a realizar a mano la mayor parte de tareas administrativas.
Manuel Escudero valora también el trabajo “excepcional”  que hacen los 120 voluntarios de Protección Civil. También espera contar pronto con un técnico en prevención.