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La Gerencia de Urbanismo de Algeciras, sin teléfono ni ordenadores

La nueva sede se inauguró el pasado viernes sin estar acabada

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La flamante nueva sede de la Gerencia Municipal de Urbanismo, inaugurada el pasado viernes, no contaba a día de ayer con los ordenadores y equipos informáticos en funcionamiento.

A esta deficiencia se suma la falta de conexión de los teléfonos de la oficina, en donde trabajan más de medio centenar de funcionarios. Esta carencia lleva a que los ciudadanos que deseen realizar una gestión no puedan recibir la asistencia debida por la carencia de material técnico.

Aún más allá, la reunión de la Gerencia Municipal de Urbanismo, que tenía previsto reunirse hoy miércoles, no podrá llevarse a cabo ante la imposibilidad de preparar los expedientes.

Los problemas de pago con Construcciones Galindo forzaron a esta empresa a negarse a entregar las llaves al Ayuntamiento hasta cobrar el más de medio millón de euros adeudado, todo ello a pesar de que las obras llevaban ya ocho meses finalizadas.

Sin embargo, el propietario de la empresa accedió finalmente a dar las llaves de la oficina con un compromiso de pago de lo debido que finaliza hoy día 30 de marzo.

Esta situación no es única ya que en las dependencias de Gestión Tributaria tampoco se dispone de teléfono, por lo que los funcionarios facilitan sus teléfonos móviles personales como contacto para tratar de solventar las dudas a los ciudadanos.

Indignación en el PP
El Partido Popular denunció ayer que “estas son las consecuencias de una pésima gestión que con el paso del tiempo se ha convertido en insostenible”.

Unos problemas que está llevando a situaciones en las que, “al final, son los ciudadanos los que pagan, con una prestación de servicios que deja mucho que desear para el Ayuntamiento de una ciudad como Algeciras”.

Como ejemplo, los populares aducen que “fotocopiadoras e impresoras sin tóner o tinta, falta de folios y de material de oficina son tónica habitual que, cuando menos, ralentizan de manera considerable el funcionamiento de algunas delegaciones ante la desesperación de los funcionarios”.

Desde el PP se recalca que, “evidentemente, se trata de un problema económico. La credibilidad del equipo de Gobierno se ha agotado hasta para los propios proveedores, que se niegan a fiar al Ayuntamiento por los problemas en los pagos”.

Una situación provocada por la deuda real acumulada, “que asciende a 232 millones de euros”, según el PP.

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