Un total de 49 comercios de la zona centro de Algeciras suscribieron el pasado mes de diciembre un documento de cinco páginas en el que, aportando como credenciales sus sellos y la firma de los propietarios y empleados, solicitaron a la Delegación de Seguridad y Protección Ciudadana “que envíen vigilancia policial por la zona de la Plaza Alta y alrededores, sobre todo por la tarde hasta la hora de cierre de los comercios”.

Dicho documento está sellado a fecha de entrada de 16 de diciembre por parte del Área de Protección Ciudadana, y días después se produjo una reunión de representantes de estas entidades comerciales con la delegada, Cristina Garrido, así como con representantes de las policías Local y Nacional, según manifestó la propietaria del estanco de la Plaza Alta, M.A.R.. En este encuentro se plantearon, según M.A.R., cuestiones como la citada falta de presencia policial en la zona, así como las carencias en materia de iluminación de la zona del enclave donde está situado su comercio y una freiduría.

Durante las Fiestas, la presencia policial fue constante en la Plaza Alta y sus alrededores, lo que proporcionó a los vecinos y comerciantes una mayor sensación de seguridad. No obstante, esta propietaria, quien fue víctima el pasado mes de noviembre de un robo con violencia e intimidación por el que tuvo que ser atendida en el hospital, denunció ayer que desde que acabaron las fiestas “los policías han desaparecido de la zona”, lo cual, en base a sus palabras, ha causado un nuevo malestar entre los comerciantes, desde los que se apunta que la medida “ha sido algo puntual que ha desaparecido en cuanto se han retirado los puestos navideños”.

Cierre prematuro
M.A.R. manifestó ayer sentirse “intranquila” y “asustada”, y comentó que en estos últimos días “estamos cerrando entre las siete y media y ocho de la tarde”, en lugar de su horario habitual, lo que evidentemente le ocasiona una cierta pérdida de ingresos. La razón, la falta de presencia policial y de iluminación de la zona.

La delegada de Seguridad Ciudadana, Cristina Garrido, confirmó tanto la recepción del documento como la celebración de aquella reunión. Agregó que la propietaria del estanco fue quien le trasladó la preocupación de los comerciantes, y que en aquella reunión estuvo presente también un inspector de la Policía Nacional y otro cargo de la Policía Local.Sobre la falta de presencia policial tras las Fiestas, Garrido declaró que no tenía conocimiento de esta retirada de efectivos.