La gestión del trabajador de los días que trabaja en parada podría ser el gran sacrificado
El conflicto laboral originado a raíz de la negociación del convenio en Nueva Generadora del Sur (NGS) parece estar llegando a su fin. Tras anunciarse el pasado miércoles la consecución de un preacuerdo, este diario ha podido saber que el comité de empresa ha logrado algunas de sus pretensiones a nivel económico, entre las que se encontraría una subida salarial con incremento de nivel para los empleados este año, así como una cláusula específica referida a las horas extra, acerca de la cual no se precisaron más detalles.
Otro aspecto que se conoce del último contacto mantenido entre los representantes del comité y la empresa es que esta última ha decidido retirar la denuncia de ilegalidad impuesta contra la huelga de los últimos días de enero, en la que se habían establecido unos servicios mínimos del 99%. No obstante, los detalles sobre este preacuerdo no tardarán en hacerse públicos. Desde el Comité indicaron que de aquí al próximo lunes se imprimirán numerosas copias del borrador de este preacuerdo, que se pondrán a su vez en los tablones de anuncios de las instalaciones de NGS para informar a los trabajadores.
Serán ellos mismos, el próximo lunes, los que votarán en asamblea si aceptan o no las condiciones reflejadas en el mismo, y entonces está previsto que los responsables del Comité de Empresa den a conocer los detalles de un posible acuerdo tras trece meses de arduas negociaciones entre las partes.
Jornada irregular El único punto en el que los representantes del comité de empresa confiesan que van a encontrar dificultades es en lo que se refiere a la llamada “jornada irregular”, en relación al trabajo en paradas.
La intención de los representantes de los trabajadores es mantener esta alternativa como algo optativo, incrementando con ello las ganancias de los trabajadores aceptando trabajar en días de parada una serie de horas de más (hasta doce como máximo). Dado que los trabajadores tienen que cubrir un cupo de horas (1.752) en un año.
Según explicaron fuentes relacionadas con la negociación, la intención de la empresa es que con la firma de estas horas remuneradas, el trabajador se comprometa a un sistema de jornada irregular en el que podría trabajar durante tres meses doce horas al día; y otros tres meses seis horas al día, sin posibilidad de elegir cuándo trabajar en parada. Otro aspecto en el que empresa y comité diferían era en el pago de estos servicios en parada, que para la empresa debería estar en 600 euros sobre el sueldo actual. Para la empresa, no superaría los 150 euros, si bien las fuentes consultadas reseñaron que “se ha podido arañar hasta algo más de 160”.
En definitiva, sería este el punto en que los representantes de los trabajadores habrían tenido que ceder más, y el que tiene más probabilidades de rechazo por parte de los trabajadores que están convocados a la asamblea del próximo lunes.