Los de Chano salieron decididos a llevarse el partido pese a que las apuestas estaban en su contra pero el inicio de los algecireños fue pletórico y a los diez minutos ya ganaban por tres goles (6-3), renta que ampliarían sensiblemente poco después, aunque el cuadro visitante recortó antes del minuto 15 (9-6). Y eso que los de casa perdonaron en exceso en los primeros instantes pues se precipitaron en tres acciones que le habrían dejado en el mano a mano con el portero rival.
Pese a todo, el cuadro algecireño fue creciendo y creyendo en sus posibilidades y con un balonmano rápido arriba y potente defensivamente (cabe destacar la buena actuación del portero Vilches) llegó a liderar el luminoso hasta por seis tantos: 16-10, renta que se mantuvo al descanso: 18-12.
A la vuelta de vestuarios, la reacción granadina no se hizo esperar, entre otras cosas por la caída física de los locales.
De los seis de ventaja se pasó paulatinamente a cinco, tres, dos... pero tocó tirar de casta y a falta de cinco minutos, con el 30-29, los ayer de rojo se ataron los macho en defensa y no marraron de cara a la meta de los de Granada para sumar un triunfo que le hace ver con más optimismo el salir de la penúltima plaza de la liga.