La estampida de caballos que tuvo lugar el pasado sábado 1 de agosto en la circunvalación de la autovía A-7 camino de Las Colinas dejó más consecuencias de las que se conocieron en un principio. Si al día siguiente de los hechos, EL FARO INFORMACIÓN tenía conocimiento de que una mujer había resultado herida leve en el impacto por alcance en el que se vieron implicados tres vehículos, fuentes de la Guardia Civil revelaban ayer que uno de los seis o siete caballos que circulaban en sentido contrario por la vía llegó a ser arrollado por un coche.

En concreto, se trataba de una yegua, cuyo propietario está identificado, y que al ser golpeada sufrió una herida de gran magnitud en el costado. Si bien el percance no le costó la vida, lo cierto es que su estado es de cierta gravedad, indicaron las mismas fuentes.

Además, este diario ha podido saber que la yegua en cuestión había dado a luz hace relativamente poco tiempo, y que a raíz del accidente tuvo que dejar de amamantar a su cría ya que sus glándulas mamarias se vieron afectadas por el impacto.

En base a estas informaciones, el equino ha pasado a la custodia de una protectora de animales no especificada con el consentimiento del anterior responsable del animal.

Además, se dio a conocer el hecho de que la yegua precisará para su recuperación de una operación quirúrgica de elevado coste, entre 4.000 y 4.500 euros.

Sin dueño
El resto de los caballos que circularon por la autovía en sentido contrario durante la jornada del pasado sábado no han sido reclamados por nadie, y hasta el momento no se sabe de dónde procedían. Al parecer, el propietario de la yegua sólo reconoció la potestad del primer animal.

Según indicaron fuentes de la Guardia Civil, las labores para retirar a los animales de la calzada fueron arduas, al no contarse con un protocolo determinado ni los medios adecuados para tal fin. De este modo, tuvo que ser un agente el que, jaleando a los animales, los atrajo hacia una zona de aguas residuales de Los Alamillos y propiciar que pasase el peligro.

La alarma saltó cuando los vehículos que circulaban en dirección hacia Las Colinas por la circunvalación de la A-7 encontraron a los equinos circulando en sentido contrario. Debido a eso, tuvo lugar un accidente de tráfico en el que se vieron implicados tres vehículos. El primero, el que golpeó al animal, quedó parado a un lado de la calzada, motivando que el de detrás tuviese que realizar una brusca maniobra. Un tercer coche que venía detrás no pudo esquivar a ambos y golpeó al primero en la parte trasera izquierda.