Diciembre en Jerez es sinónimo de overbooking en los restaurantes del centro y en muchos casos de la periferia para los próximos seis fines de semana para las comidas navideñas. A estas alturas, la mejor prueba de ello es que en un buen número de ellos ya han colgado el cartel de completo hasta el 6 de enero, la jornada de Reyes, y la última más potente en la que cada vez más familias deciden reunirse para celebrar el final de las fiestas. Lo más destacado, según el sondeo realizado por este periódico, es que estas reservas no vienen ni de semanas ni de días atrás, sino que la que menor antelación tiene es de noviembre, mientras que otras se cerraron en verano e incluso el año antes para el caso de la clientela más fiel, que intenta incluso sentarse en la misma mesa si les gusta. Lo que sí ha cambiado de unos años atrás, coincidiendo con el tirón de las zambombas y su poder de convocatoria, es el reclamo de los clientes, que prefieren reservar para almorzar en las reuniones familiares, de amigos y de compañeros de trabajo y dedicar la tarde a irse de zambombas. No obstante, los fines de semana la demanda también es muy alta para esta franja de la noche.
En el restaurante Albores, en la calle Consistorio, desde hace semanas es casi una misión imposible encontrar una mesa libre para almorzar los fines de semana de este mes. “Estamos hasta la bandera, y entre semana a partir del jueves también. Con suerte se puede encontrar sitio en la terraza pero por orden de llegada”, señala el encargado, que asegura que las expectativas para esta campaña de Navidad son “mejores que el año pasado”, que ya fue muy positivo “porque Jerez se está vendiendo muy bien fuera”. La mejor evidencia es que están prácticamente al completo desde noviembre.
A pocos metros, en La Cruz Blanca, sólo tienen hueco los días laborables, una situación que creen que aún puede cambiar una vez que vayan avanzando los días. “El año pasado a estas alturas teníamos más reservas de lunes a jueves, pero de todas formas los fines de semana no se cabe, no sé si vamos a entrar los camareros porque está todo lleno. De todas formas, aunque no tengamos reservas entre semana al final se llenará”, señala uno de los camareros. En este caso, las primeras reservas se cerraron en mayo, en la Feria del Caballo, para el caso de gente de fuera, mientras que también hay un buen número de mesas apuntadas desde septiembre. “Son gente de fuera que vienen siempre y les gusta asegurarse de que van a tener sitio”. En Casa Sánchez están también completos desde noviembre y tienen aún mejores sensaciones que el pasado año. Eso sí, encontrar un hueco libre a estas alturas es complicado. “Sólo tenemos sitio algún miércoles y algunos domingos. Tenemos gente tanto de día como de noche, aunque las noches están más tranquilas”. Fuera del centro, otros enclaves tan conocidos como Mesón Lomopardo y Venta Esteban tampoco dan abasto. En el primero ya están cerrando el segundo turno de la comida del Día de Reyes, y las previsiones son aún mejores que el pasado año. “Ya la semana pasada tuvimos comidas de algunas reuniones familiares, y para los próximos fines de semana estamos completos. Los más fuertes, además del Puente de la Inmaculada, son los del 13 y el 14 y el anterior a la Nochebuena. Tanto en este caso de nuevo, como en la Venta Esteban, la fidelidad de los clientes es clave, de ahí que lleguen a reservar incluso “de un año para otro”. Entre semana también hay movimiento de colectivos y trabajadores de los locales de ocio nocturno y hostelería, que no pueden librar los fines de semana.
Horeca: “Jerez es un referente en Navidad en toda España”
El presidente de Horeca, Antonio de María Ceballos, augura las mejores perspectivas para la hostelería en la Navidad jerezana, a la que contribuyen añadidos extras como el “espectacular tiempo” que está haciendo. “Jerez es un referente en Navidad en toda España con sus zambombas y diciembre es el mes de agosto. La hostelería está preparada y cargada con todos los productos para atender a decenas de miles de personas de todo el país. De cara al próximo puente, tanto Jerez como el resto de la provincia están “a tope”