El Xerez DFC Toyota Nimauto jugará, a partir de la próxima semana, la segunda fase del campeonato en la que pelearán por conseguir la permanencia en Segunda División B. Los xerecistas, que arrastran los puntos conseguidos en la primera fase, ya conocen el calendario que tendrán para esta parte final de la liga. En primer lugar, los de Jesús Azurmendi visitarán al Sporting Constitución en una segunda fase a ida y vuelta en la que, además, se verán las caras con Torremolinos, Victoria Kent, Zambu Pinatar, Puntarrón Futsal y Atlético Carranque. Asimismo, en esta fase participarán Carmonense, Cádiz Virgili, Jaén Paraíso Interior B y Unión África Ceutí B, contra los que los azulinos no tendrán que enfrentarse por haberlo hecho ya en su subgrupo. En esta nueva clasificación, los cinco primeros conseguirán la permanencia y los seis restantes descenderán a Tercera.
Para el entrenador azulino, el balance “a nivel de rendimiento y resultados ha sido un poco dispar. No ha sido el que esperábamos. Todo lleva su proceso y requiere tiempo y el equipo crece mucho. Vivimos una situación compleja a mediados de temporada y hemos crecido mucho, estamos en el camino. El balance es positivo”.
De cara a esta segunda fase, el técnico destaca que “el calendario no es el mejor posible. Pero es el que hay, tenemos que jugar contra todos. Nos toca hacerlo bueno. El equipo está preparado y lo afrontamos con optimismo con la garantía que da el crecimiento que ha tenido el equipo”.
Entre que acabó la primera fase y empieza la siguiente ha habido un parón que “nos ha venido bien”, comenta Azurmendi. “Llegamos justos a la última jornada. Tuvimos que forzar a algunos jugadores que tenían sobrecargas y molestias. Aproveché para dar una semana de vacaciones porque la necesitaba el equipo. Y ahora estamos reactivando el equipo y la semana que viene ya entramos en ciclos de competición”.
Para el jerezano, la presión “es muy distinta” cuando se trata de una fase de ascenso y una de descenso. “Nosotros éramos un equipo que queríamos entrar en la fase de ascenso, pero para asegurar la permanencia. A partir de ahí la presión es bastante mayor cuando hay que jugar para no bajar”. El entrenador aterrizó esta temporada en la disciplina xerecista y de su llegada comenta que “poco puedo hablar, estando lejos no tenía muchos conocimientos de lo que era el club. Una vez dentro me he encontrado un club muy organizado, más de lo que esperaba. Es un club que trababaja muy bien con los recursos que tiene”.
El año, marcado por el Covid, ha sido de “mucha incertidumbre, es lo que ha tocado con el virus, que ha condicionado mucho. Eso sí, somos afortunados por poder competir. En el día a día, cuando ha habido brotes fuertes, la incertidumbre ha sido la nota dominante”.
Vuelta a casa
El entrenador del Xerez DFC Toyota Nimauto, Jesús Azurmendi, vuelve a casa, a Jerez, tras muchos años en el extranjero entrenando. Dice el técnico que fueron “ocho años fuera. Entendía que me tocaba volver. En Francia estaba mejor que aquí, pero no encontré un proyecto que me atrajera y se dieron ciertas circunstancias personales. Al final lo que me trajo aquí fue el cómputo de todo. El proyecto me enganchó”.
