Nuestra Señora del Carmen Coronada procesionó por las calles de Jerez en la tarde noche de este pasado viernes,después de que el año pasado se suspendiese el cortejo a causa de la pandemia. La salida procesional ha sido la primera en transitar por las calles de la ciudad en casi un año y medio -también la primera en hacerlo en toda Andalucía-. De hecho, hay que remontarse a febrero de 2020, fecha en la que se celebró el solemne Vía Crucis del Consejo de Hermandades, para recordar la última salida procesional como tal por las calles de la ciudad, presidida entonces por el misterio de la Hermandad de Las Angustias.
Retornan, pues, las salidas procesionales, pero respetando asimismo las circunstancias sanitarias actuales, para lo que se modificó el itinerario habitual del Carmen, así como varios aspectos de la procesión, en los que la propia Hermandad puso todo su empeño y dedicación, de manera que se respetara en todo momento el uso de la mascarilla y la distancia de separación entre los participantes en el cortejo.
La Santísima Virgen procesionó entronizada sobre las andas de la “Carroza del Corpus Christi”, que emplea ruedas para su desplazamiento, llevando en su interior un máximo de siete personas, todas ellas con la pauta completa de vacunación. Le faltó el acompañamiento de la “Banda de Música del Maestro Tejera”, descartado este pasado lunes para preservar las distancias de seguridad en la calle ante la previsible gran afluencia de público al reencuentro con la Reina del Carmelo.
La procesión comenzó a las 20.30 horas y, como estaba previsto, no prolongó su presencia en la calle más allá de las dos horas. Eso sí, en su trayecto final tuvo lugar el tradicional fervorín dedicado a la Santísima Virgen y que fue proclamado por David del Carpio Horcajo, de la Orden Carmelita y Prior Provincial de los Carmelitas de la Bética.
