Es la cifra mínima acordada con los sindicatos para que no se produzcan bajas forzosas
Más de 1.314 trabajadores se han adherido al Expediente de Regulación de Empleo de Unicaja Banco, la cifra mínima que se acordó con los sindicatos en la negociación del ERE para garantizar la voluntariedad de las salidas y que no se recurra a bajas forzosas, aunque los inscritos deben cumplir los requisitos.
Las centrales UGT y CIC –que engloba a SUMA-T, STC y SIBANK- han celebrado y confirmado a Efe el alcance de esta cifra, cuando todavía restan 10 días para que finalice el plazo de un mes previsto para adherirse al ERE en el que Unicaja pretende dar de baja a 1.513 trabajadores de la empresa.
Estas fuentes aseguran que aunque no se llegue a la cifra de 1.513 empleados, la entidad y las centrales acordaron que, una vez alcanzado este número, se garantizaría la voluntariedad de las salidas y el banco no debía forzar bajas, siempre que los trabajadores adheridos cumplan con lo necesario para acogerse al ERE.
Los empleados interesados en salir del banco con las condiciones propuestas deben formular su adhesión por escrito antes del 15 de enero del 2022 y la empresa tendrá otro mes más para confirmar si los trabajadores que se han acogido a estas medidas cumplen los requisitos.
El secretario general de CIC, Jesús Barbosa, ha explicado a Efe se ha logrado “el objetivo de proteger a la plantilla del despido forzoso” y que las salidas “se pudieran ordenar bajo una verdadera voluntariedad de los trabajadores”, al contrario de lo que ha ocurrido en otros ERE, a su juicio.
La adhesión voluntaria era el principal argumento de las organizaciones sindicales a la hora de negociar con la entidad el proceso de despido colectivo, traslado colectivo y homologación de condiciones de trabajo, una máxima presente en el acuerdo al que se llegó en la madrugada del 3 de diciembre.
El acuerdo fue alcanzado entre Unicaja Banco y las secciones sindicales de CCOO, UGT, CIC –que engloba a SUMA-T, STC y SIBANK- y CSIF, que representaban el 76,92 por ciento de los miembros de la Comisión Negociadora, en el último día del periodo formal de negociación.
CESICA fue el único sindicato que ha rechazado este acuerdo ya que -a su juicio- no se garantiza la voluntariedad de las extinciones ni movilidades y hay prejubilaciones peores que en el acuerdo de 2018, entre otras cuestiones.
Unicaja pretende el cierre de 395 oficinas y dar de baja a casi 2.700 empleados dado que a los 1.513 despidos contemplados en el ERE se suman unas 1.200 prejubilaciones, 730 que estaban en excedencia en Liberbank y 437 de la antigua Unicaja Banco con los que se ha alcanzado un acuerdo.
Esta negociación del ERE se ha llevado a cabo tras la fusión de Unicaja Banco y Liberbank, que supuso la creación del quinto banco del país, con un volumen actual de activos cercanos a los 110.000 millones, más de 4,5 millones de clientes y aproximadamente unas 1.400 oficinas.